Inicio Noticias Faustino Rupérez, ganador de la Vuelta 80: “Tenía que haber ido...

Faustino Rupérez, ganador de la Vuelta 80: “Tenía que haber ido más despacio”

Su historia fue muy veloz. De soldador a ciclista profesional. Y de ahí a ganar una Vuelta a España con 23 años. Pero aun así su mayor repercusión fue de director en el Kas con Sean Kelly.  

“Me hice como ciclista en Torrejón de Ardoz”, recuerda hoy Faustino Rupérez, que va a cumplir 67 años. A los 23 ganó la Vuelta a España pero después ya nada fue igual. Nunca fue mediático. Quizás porque gastó sus mejores balas demasiado pronto. “No supe dosificarme, lo reconozco”.

Ganó la Vuelta a España (1980) con 23 años. ¿Qué le faltó para ser un grande?
No sabría decir. Gané la Vuelta con esa edad, sí. Fue muy prematuro, demasiado. Tendría que haber sido diferente, sobre todo porque antes lo disputabas todo desde el inicio en la Ruta del Sol. Aquello te machacaba mucho mentalmente.

Y se quemó 
Sí, puede ser. Me lo tendría que haber tomado con más filosofía. Pero era innato, era mi carácter. No podía ir en contra de eso. Si tenía la más mínima posibilidad de ganar iba a por ello. No sabía dosificarme. Ese fue mi problema, lo reconozco. Lo disputaba todo.

¿Y no se cansaba?
Cuando eres joven no te cansas. Al menos, físicamente. Pero con el paso del tiempo te das cuenta de que la cabeza lo acusa, porque hay que estar pendiente de cada carrera desde el inicio. Eso era estrés. Pero a un chaval de 23 años no es fácil convencerle de eso. No tienes esa capacidad. Ni siquiera lo piensas.

¿Y cómo se hizo ciclista?
Cuando murió mi padre, a los 53 años, vinimos de mi pueblo de Soria a vivir a Madrid, a Torrejón de Ardoz. Me gustaba y me apunté al club ciclista por mi cuenta. Yo era el menor de cinco hermanos. En la bicicleta iba a mi aire. Me sentía feliz.

Y se hizo grande.
Yo era soldador y lo compaginaba con el ciclismo hasta que empecé a reducir horas y a dedicarme a tiempo completo a la bicicleta porque surgió esa oportunidad.  Y fue un lujo, sí, claro, porque yo veía a mis hermanos… Uno era taxista, otro conducía un camión,  otro se quedó en el campo…., mi misma hermana trabajaba en una fábrica.

¿Mereció la pena ser ciclista?
Sí, por supuesto. Era algo que me gustaba y pude vivir de ello.

Y encima ganó una Vuelta a España.
Pues imaginese. Eso fue lo máximo.

Incluso para la familia.
Todo un orgullo. Fue una satisfacción enorme, toda esa constancia. El resultado fue fantástico.

Abrió telediarios.
No. Eso no. En esa época no se crea. No tenía la repercusión de hoy en día. Era muy limitada. Daban un reportaje después del telediario. Hay veces que lo daban muy tarde y la gente no lo veía. Pero cuando la televisión empezó a echar directos ya fue diferente.

No se le recuerda mucho.
Se me recuerda casi más por ser director de equipos. Gané la Vuelta a España con Sean Kelly en Kas. Éramos casi el mejor equipo del mundo. Kelly ganó muchas carreras, yo era el director y ahí tuve más repercusión. Los medios de comunicación me preguntaban.

¿Y cómo era el granjero?
Tengo un recuerdo fantástico de él. He visto pocos ciclistas tan profesionales como Kelly. Era ejemplar en la mesa, en los entrenos, en las carreras. Para mí fue un maestro. Recuerdo cuando se tuvo que retirar por un forúnculo.  Era la primera gran Vuelta a su alcance. Había ganado clásicas y la estaba tocando con los dedos. Estábamos muy cerca de Madrid y…..

¿Tiene trato con él?
No, la verdad es que no. Estoy desvinculado del ciclismo. Han pasado 17 años desde que dejé la ONCE.

¿Y ahora a qué se dedica?
Ahora estoy jubilado, me dedico a hacer deporte. Vivo entre Coslada y Alfaz del Piz. Nos gusta hacer alguna escapada con moto a mi mujer y a mí. Soy un tipo feliz que es lo más importante. Tengo un nieto de ocho años que no sé si será ciclista. Lo importante es que haga lo que él quiera. Yo siempre se lo digo.

¿Y le cuenta cómo era su época?

No, porque era otro mundo. Muy precario a comparación de hoy en día, desde vehículos hasta bicicletas. Llevaba una bici básica. No tenías entrenador ni manager ni médico. Lo único, el director de equipo.

Que era Javier Mínguez. 
Tenía una visión muy ágil, muy astuta. Era un hombre que sabía rodearse de ciclistas combativos y yo fui uno de ellos. Recuerdo nombres como Ángel Arroyo, Chozas, Alberto Fernández, Pedro Muñoz, Álvaro Pino…

Alberto Fernández murió a los meses de perder la Vuelta a España por seis segundos
Lo recuerdo.  El día previo entregaba Unipublic entregaba el premio al mejor ciclista de la temporada en Madrid. Habíamos estado concentrados en Sierra Nevada. El día antes vinimos en coche. Yo estaba en casa cuando me enteré de la noticia. Él se iba desde aquí a Santander y en el viaje de regreso tuvieron un accidente.

¿Y cómo se superó aquella tragedia?
Fue muy duro. Pero, al final, la vida sigue. Se le echaba mucho en falta, su carácter, su manera de ser.  Siempre recordaré cuando perdió la Vuelta a España por seis segundos con Eric Caritoux. Apenas hubo que consolarle, porque él se reponía muy rápido, era muy luchador, tenía esa constancia. No destacaba en nada en concreto. Pero se defendía en todos sitios y tenía un ánimo sobresaliente.

 


Suscríbete a nuestro newsletter

Recibe en tu correo lo mejor y más destacado de BICIO

Deja un comentario

Please enter your comment!
Please enter your name here

Con la publicación de un comentario acepto expresamente recibir la newsletter y soy conocedor de que puedo darme de baja en cualquier momento de acuerdo a nuestra política de privacidad