Algunos corredores tienen una chispa difícil de explicar. Son simpáticos con los medios, empáticos con los aficionados, su manera de celebrar los éxitos es tranquila e incluso conmovedora… Y hay ciertos gestos que agrandan sus leyendas.
Que Pogacar es uno de los ciclistas más queridos entre los aficionados es de sobra sabido. Y no solo por sus victorias incontestables tanto en grandes vueltas como en carreras clásicas, sino que también son muy importantes pequeños gestos que tiene tanto con sus contrincantes como con los amantes del ciclismo.
El otro día ya vimos como le regaló a Pellizari, tras adelantarle a 1 km de meta y levantarle la victoria, el maillot y las gafas de líder del Giro. Pues bien, en la etapa número 20 que también acabó con la victoria del esloveno, también tuvo un bonito gesto, pero esta vez con un niño aficionado.
En una zona de la subida final al monte Grappa, la más dura de la jornada, exactamente en un tramo del 14% de desnivel un niño vestido con un maillot azul abierto corría junto a Pogi cuando justo uno de los integrantes del equipo UAE le ofreció un bidón con líquido. Pogacar no lo dudó, agarró el bidón e inmediatamente se lo dio al aficionado.
El niño probablemente no olvide este día. Y el resto de aficionados al ciclismo tampoco, pues esta es la confirmación (una vez más) de que Pogi es especial.
A tus pies, Tadej.
El detallazo de Pogacar con un niño.👏🎩#GirodItalia | #LaCasadelCiclismo pic.twitter.com/OcrY0WdpIN
— Eurosport.es (@Eurosport_ES) May 25, 2024
