El Ebro nace en Hermandad de Campoo de Suso (en Cantabria) y llega hasta el Mediterráneo (exactamente en la provincia de Tarragona). En sus 930 kilómetros de longitud atraviesa 10 provincias españolas de oeste a este y resulta que es el segundo río más largo de los que desembocan en el Mediterráneo solo detrás del Nilo.
El caso es que, a su paso por Burgos, el río ha esculpido a lo largo de los años el terreno de modo que actualmente es un lugar perfecto para la práctica del BTT.
Y es que el Ebro, tras partir de Cantabria, se adentra en La Rioja tras discurrir unos pocos kilómetros por el norte de las provincias de Palencia y Burgos. Unos cuantos kilómetros que, a lo largo del tiempo, han conformado un paisaje muy interesante a nivel visual y de biodiversidad.
Por ello, con 31 kilómetros, esta ruta circular es perfecta para aquellos amantes de la naturaleza. El recorrido transcurre por paisajes espectaculares en diversas épocas del año así como enclaves llenos de historia como puentes medievales y vestigios románicos.
Flora y fauna en los cañones del Ebro
La cantidad de animales que se pueden encontrar durante este recorrido es impresionante. Eso sí, requiere de estar atento e incluso parar en ciertos lugares a esperar que la naturaleza siga su curso.
Además de pequeños mamíferos, si se mira hacia el cielo no se difícil encontrar buitres leonados, halcones peregrinos y águilas reales oteando el terreno en busca de alimento. Incluso en ciertas ocasiones se les puede ver lanzándose en picado en plena cacería o incluso aterrizar buscando algo de carroña que llevarse a la boca.
Evidentemente, donde hay animales también suele encontrarse una gran biodiversidad botánica. Por eso no es raro que existan diversidad de especies de árboles durante el recorrido. En esta zona no te será difícil encontrar zonas boscosas pobladas por fresnos, chopos, sauces y tilos.
La ruta por los cañones del Ebro en detalle
Empezando en Quintanilla Escalada, el recorrido se interna por el fondo del Cañón del Ebro hasta llegar a la desembocadura del río Rudrón sobre el Ebro. Allí se pueden observar unas cascadas que suelen llegar llenas de agua sobre todo en primavera.
Tras pasar la Ermita de Ebro, continuaremos por el fondo del cañón hasta llegar a la altura de Pesquera de Ebro. Desde allí nos alejamos del Ebro y ascendemos suavemente hacia Turzo, donde el paisaje se transformará completamente y los páramos se convierten en los protagonistas absolutos.
Una vez pasado Turzo, el recorrido discurre hacia la Venta de Orbaneja y comienza el descenso hacia el pueblo de Orbaneja del Castillo. Desde allí, desde el mirador, se puede ver el cañón del Ebro y Orbaneja del Castillo.
Desde allí se desciende junto a la cascada que brota de la Cueva del Agua para continuar por la carretera hasta el puente que cruza el Ebro. Ya en la otra orilla el sendero, se transcurre de nuevo por el cañón y, tras pasar junto a Escalada, se llega al inicio de la ruta.
En total 31 kilómetros de paisajes, agua, roca y biodiversidad junto al Ebro en una ruta circular sencilla y cuyo desnivel apenas supera los 400 metros. Puro disfrute al norte de Burgos.
Aquí puedes seguir la ruta en wikiloc.
