Mourinho acata la sanción de un partido... y volverá ante el Arsenal

La Federación Inglesa (FA) impuso finalmente al técnico luso un castigo bastante inferior al esperado en el plano deportivo, dado que inicialmente se barajó la posibilidad de que tuviera que cumplir cuantro encuentros de suspensión. Al final, se quedó en sólo uno, más dos importantes multas.

Mourinho no estará en el banquillo en el próximo encuentro ante el Swansea. Esta pena le fue aplicada por las "palabras insultantes" que, según la FA, dirigió al arbitro Mark Clattenburg en el descanso del duelo del pasado fin de semana ante el Burnley (0-0) -y que motivaron su expulsión-, además de una multa de 8.000 libras (9.000 euros) por este concepto.

La segunda multa, de 50.000 libras (55.000 euros), se le impuso por sus críticas al colegiado Anthony Taylor antes del Liverpool-United del pasado 17 de octubre. La FA considera que incurrió en un caso de "conducta impropia".

Mourinho no dirigirá al equipo ante el Swansea, pero estará ya en el banquillo en el duelo de dentro de dos semanas ante el Arsenal, con cuyo entrenador, Arsène Wenger, mantiene una vieja rivalidad.

Según la FA, una Comisión Reguladora Independiente consideró que los comentarios del técnico luso antes de enfrentarse al Liverpool "desprestigiaron el encuentro, por lo que, además de ser multado, también fue advertido de su conducta en el futuro".

Sobre su expulsión ante el Burnley (0-0), Mourinho "admitió el uso de palabras abusivas y/o insultantes hacia el árbitro y aceptó la sanción", explica el comunicado de la Federación. El técnico protestó airadamente un posible penalti sobre Darmian.