Vinicius Jr. no fue Neymar Jr. y dejó que sus agentes decidieran por él

Joaquim Piera

Vinicius Jr. es el penúltimo antojo despilfarrador de Florentino Pérez, que pagará 61 milones de euros para una promesa de crack, que tiene solo 16 años y que ni tan siquiera ha debutado en el primer equipo del Flamengo. Una locura. 

El Barça tenía muy bien encaminadas las negocaciones con la perla flamenguista a quien seguía desde hacía dos años y medio, gracias a las perspicacia de André Cury, el hombre de la secretaría técnica en el mercado sudamericano.

Los agentes de Vinicius Jr. estuvieron en Barcelona en abril. Todo iba por el buen caminoAl chico se le entendía todo cuando aseguraba que su sueño era jugar con su ídolo <strong>Neymar</strong>, o que siempre elegía al Barça cuando juega a la consola, o cuando decía que Messi era mejor que Cristiano

Florentino apareció en escena pocos días atrás. Traumatizado por el no de Neymar Jr., no quiso que la historia se repitiese. Y una vez más, se sacó, sin reparo alguno, la chequera para pagar su capricho. Poco le importó al presidente blanco pagar el doble de la actual cláusula de rescisión de Vini, que es de 30 millones de euros.

El golpe de efecto de Florentino fue convencer a los agentes del jugador, que se embolsarán 17 millones de euros: 8 en concepto de comisión y 9 correspondientes al 20% de los 45 millones que el Madrid pagará de traspaso. Y estos, manejaron como quisieron al futbolista y a sus familiares, que se llevarán 8 millones de euros más de prima de traspaso.

Por mucho que solo tenga solo 16 años, Vinicius bailó como un títere al son que le dictaron. Deseaba seguir la senda de los cracks brasileños que triunfaron en el Camp Nou y ha acabado vestido de blanco. En este aspecto, su falta de comprimiso y personalidad está a años luz de la que mostró Neymar en su día.

En septiembre de 2011, el Barça dio por perdido a la estrella emergente del Santos FC, que con 19 años, era un fenómeno de masas en Brasil tras haber ganado la Libertadores, dos Campeonatos Paulista y una Copa do Brasil.

Empujado por su agente, Wagner RibeiroNey llegó a pasar una revisión con el jefe de los servicios médicos del Real Madrid en el Hospital Sao Luiz, en el barrio de Morumbi, en Sao Paulo. Florentino había enviado una comitiva a Brasil encabezada por el abogado y ex director general del club, <strong>Julio Senn</strong>.

Los contratos estaban redactados por el mismo Emilio Butragueño. Solo faltaba que Neymar estampara su firma. El delantero, sin embargo, no solo se negó a hacerlo sino que llamó al Barça, para que lo 'rescatase'. Y a partir de allí, se selló el acuerdo con el Barcelona. 

El desplante de Ney aún le produce cremor de estómago a Florentino, y ahora ha intentado aliviarlo, en parte, con Vinicius Jr., a quien ha convencido en un plis plas, dándole ficha de Galáctico y enjabonándole con 8 millones de euros más de comisión.