Abrines desvela el calvario que le llevó a dejar temporalmente el baloncesto

Álex Abrines se anima a contar su historia

Álex Abrines se anima a contar su historia / @alexabrines

Sport.es

Hace solo unos meses Álex Abrines rescindió su contrato con los Thunder por motivos personales. Nadie lo vio venir porque el jugador se había hecho un hueco en la NBA como especialista en su rol de tirador.  

La decisión, de mutuo acuerdo entre el alero y el club, se despachó con muy pocas explicaciones. Pero los medios de Estados Unidos respetaron la privacidad del jugador.

Desde entonces los rumores sobre Abrines han sido una constante y ahora el propio jugador ha decidido dar un paso adelante y dar explicaciones.

Lo ha hecho con un vídeo que ha publicado en las redes en el que desvela el calvario que ha vivido en los últimos meses. "Querido amigo, la que me has liado. Tanto tiempo juntos y ahora me haces esto". Así empieza un vídeo en el que se dirige al balón que tanto tiempo le ha acompañado desde que era pequeño.

"Nos conocemos desde que no sabía ni caminar. Años y años de una amistad inquebrantable hasta que hace unos meses todo se rompió en mil pedazos porque empezaste a darme miedo. No te podía ni ver. Incluso llegué a odiarte. Vernos era casi una obligación. A la más mínima oportunidad te esquivaba. Solo quería huir de ti y de todo lo que te rodea", reconoce.

Abrines, a quien el Barça quiere recuperar este mismo verano, explica todo el proceso que le ha llevado a volver a sentir las ganas de ser jugador de baloncesto.

"Pasé mucho tiempo diciéndome a mí mismo que todo esto no podía ser verdad. Que no tenía sentido, que tenía que ser el que era. Por eso pedí ayuda a los míos y recurrí a los mejores profesionales para recuperar la felicidad que sentía cada vez que estábamos juntos", reflexiona.

"Decidí decir basta, quería luchar por nuestra amistad y recuperar juntos la sonrisa. No ha sido fácil, muchas veces he pensado en tirar la toalla. Me decía a mí mismo que encontraría otras maneras de inspirarme y sacar lo mejor de mí. Pero nada ni nadie me ha calado tan hondo como tú, así que me he armado de valor para acabar con esta pesadilla. Y lo he conseguido, he recuperado la sonrisa, las ganas de verte y de volver a pasar una y mil horas juntos. Querido balón, he vuelto.Soy yo, Alex, gracias por estar ahí siempre esperando", se despide.