Dolor, sensación de picazón, dificultad al tragar, voz ronca o debilitada… ¿Quién no ha pasado por eso alguna vez? Actos tan cotidianos como beber, comer o dormir resultan tan molestos con esta afección que instan a buscar solución de inmediato. Por eso recopilamos remedios para el dolor de garganta que funcionan.
Son remedios naturales porque, en su mayoría, se realizan a partir de ingredientes naturales fáciles de encontrar, y que probablemente ya tienes en casa. Toma la dosis justa y combina la acción de más de uno para atajar el problema cuanto antes.
Tiene efectos antisépticos e higroscópicos que se han demostrado eficaces contra la faringitis y la tos. Por eso su consumo está considerado como uno de los remedios caseros más rápidos para el dolor de garganta.
La miel puedes tomarla sola, como si fuera un caramelo. Toma una cucharadita y repósala en la parte posterior de la boca antes de tragar. También puedes tomarla en infusiones y combinar sus efectos con otros antibacterianos naturales, como el limón.
Sea cual sea tu formato preferido, recuerda que es un remedio ideal solo para niños mayores de un año y adultos. Los bebés no deben por la posibilidad de que contenga Clostridium botulinum, una bacteria que provoca botulismo.
Por otra parte, el própolis es una sustancia que también procede de las abejas, pues la recogen de las yemas de plantas o cortezas de árboles. Como la miel, tiene propiedades antisépticas y antibacterianas que también la hacen muy recomendable.
Es el principio activo de algunos medicamentos para el dolor de garganta que, quizás, te resulten más fáciles de tomar que en su estado natural. Si prefieres esta última opción, puedes comprar propóleo o própolis en una tienda de productos naturales, diluirla en agua templada y tomar como una infusión.
La visita al herbolario es muy recomendable cuando buscas remedios para desinflamar faringe y laringe. Entre las hierbas, flores y raíces cuya eficacia ha sido avalada para tratar el dolor de garganta están las siguientes:
Sirven como remedio temporal en los picos altos de dolor, ya que la sal absorbe el agua de la membrana mucosa. Por este motivo, si abusas, se puede resecar, así que basta con hacer las gárgaras durante medio minuto unas tres veces al día. Una cucharadita de sal disuelta en 240 ml de agua templada será suficiente.
Es otro formato de bebida caliente para aliviar el dolor, ya que favorece la hidratación y reduce la mucosidad. Puedes prepararla a tu gusto, con vegetales u otras carnes, pero evita los lácteos porque aumentan la mucosidad.
Tiene propiedades antibacterianas, así que puedes usarlo para hacer gárgaras tres veces al día. Para ello, debes mezclar una cucharada en un vaso de agua. Si combinas su efecto con los del limón, mejor.
Cuando duele al tragar, los caramelos proporcionan un alivio instantáneo, ya que aumentan una salivación que suavizará la garganta. Mitiga el dolor y combate otros síntomas asociados, como la tos.
Se suelen recomendar los de menta, pero tienen el mismo efecto los caramelos de eucalipto, miel, limón o naranja. Si son sin azúcar, mejor.
Cuando la garganta irritada persiste o va acompañada de otras afecciones, como la tos seca o la afonía, puede ser útil una visita a la farmacia. Muchos de los productos que encontrarás en ellos tienen como principios activo algunos de las hierbas, raíces o flores mencionadas.
Algunos ejemplos de medicamentos que puedes encontrar sin receta son los siguientes:
El resfriado común, la gripe o el covid son enfermedades virales que pueden provocar dolor de garganta, además de otras como la mononucleosis, el sarampión o la varicela. También puede estar causada por la bacteria estreptococo, que provoca la faringitis, uno de cuyos síntomas es la amigdalitis (inflamación de amígdalas).
Acude al médico si experimentas otras síntomas, como la fiebre o la dificultad para respirar. También si, aun en ausencia de otros síntomas, el dolor prevalece más allá de unos pocos días.
Mientras te duela, otros consejos útiles que puedes poner en práctica son los siguientes:
Recetas caseras, medicamentos de venta libre, el cuidado del ambiente, el descanso y la hidratación, esas son los remedios que funcionan para el dolor de garganta. En pocos días, será agua pasada. Si no, hay que acudir a un profesional de la salud.