Nos encontramos en plena temporada de marchas cicloturistas. Los ciclistas que participan en este tipo de eventos están en pleno pico de forma y es que en los meses de mayo y junio es cuando se realizan las mejores marchas cicloturistas de europa.
Ante esto nos preguntamos el motivo por el cual algunas de estas marchas cicloturistas triunfan mientras que otras muchas ven como al año siguiente se ven obligadas a bajar el telón y renunciar a una nueva edición.
Es evidente que el público, en este caso los ciclistas, valora diferentes aspectos pero empieza a ser hora de que alguien se pregunte qué es exactamente lo que lleva a triunfar a algunos y a fracasar a algunos otros. Por este motivo vamos a analizar diferentes aspectos y condicionantes que los usuarios tienen en cuenta a la hora de inscribirse o no en un determinado evento.
Evidentemente el precio es un factor condicionante para muchos de nosotros. Si no fuera por el precio y por el tiempo necesario a todos nos gustaría poder disfrutar pedaleando por el mundo en alguno de los viajes en bicicleta más bonitos del mundo.
El factor precio es importante pero al mismo tiempo no deja de ser curioso cómo este aspecto parece pasarse por alto en algunas ocasiones. Participar en un Ironman (oficial de la franquicia) cuesta más de 400 euros y la verdad es que este desproporcionado precio no supone un impedimento para que cada año miles de personas participen alrededor del mundo en eventos Ironman.
Por lo general el precio condiciona más los eventos deportivos de nueva creación. De esta forma los eventos que gozan de cierta reputación y que año tras año llenan todas las plazas disponibles se permiten el lujo de subir los precios y de que esto no afecte al número de inscritos. Al fin y al cabo por mucho que todo esto sea deporte se rige igualmente por la ley de la oferta y la demanda. Por suerte muchos organizadores siguen buscando la satisfacción de los participantes y compensar de esta forma cada uno de los euros invertidos en el proceso de inscripción.
En mi opinión el precio es relativo y siempre hay que relacionarlo con la calidad del evento y con los servicios recibidos. No serias el primero que por un precio aparentemente demasiado alto se pierde una marcha cicloturista espectacular en recorrido, avituallamientos y espectáculo.
No serías el primero que sale confiando en los avituallamientos de la marcha cicloturista y termina vacío y pillando una pájara de campeonato.
Los que hemos participado en muchas marchas cicloturistas estamos acostumbrados a ver de todo. La mayoría de organizadores cumplen y la verdad es que en gran parte de las marchas el ciclista no se puede quejar en absoluto. Los avituallamientos son generosos y variados, aunque siempre aparece la típica carrera que escatima en comida y bebida y deja prácticamente sin combustible a los últimos clasificados.
La calidad y variedad del avituallamiento es otro factor a tener en cuenta a la hora de puntuar una determinada marcha cicloturista. En cualquier caso y a modo de recomendación personal te aconsejo que siempre salgas con algo de comida en el maillot por lo que te puedas encontrar. Más vale prevenir que curar.
Otro punto importante que frena a muchos ciclistas es el tema de la logística. En cuanto a logística me refiero especialmente al punto de salida y de llegada. Las rutas circulares que se inician y terminan en el mismo punto son más fáciles de gestionar. De hecho algunos grupos de amigos aprovechan incluso para pasar el fin de semana juntos y alquilar algún apartamento o casa rural cerca de la zona. Las rutas no circulares también tienen éxito pero la mayoría de marchas que funcionan con este formato son eventos deportivos muy consolidados, caso por ejemplo de los monumentos como el Tour de Flandes, la Milán Sanremo, la Lieja Bastogne Lieja o la París Roubaix que cada año aglutinan a miles de ciclistas para participar en su versión cicloturista.
No podía faltar la variable del recorrido. Vivimos una época en la que parece que si no participas en pruebas de larga distancia no eres nadie. El ultrafondo está de moda y esta moda lleva a miles de personas a buscar la consecución de retos personales en pruebas deportivas.
Es importante tener claros los límites y afrontar el concepto de capacidad de superación con coherencia. Si no has realizado marchas cicloturistas de 150 kilómetros no tiene ningún sentido que te inscribas en una de 300 por mucho que tu vecino o tu amigo lo hicieran el año pasado.
En el caso del ciclismo el recorrido vendrá condicionado por la distancia pero también por el desnivel. Algunas marchas cicloturistas en España afrontan más de 5000 metros de desnivel positivo en menos de 150 kilometros, una auténtica barbaridad por la que conviene estar debidamente entrenado (os lo puedo asegurar en primera persona).
Si estás inscrito en alguna marcha cicloturista, vas perdido y no tienes muy claro cómo afrontar el entrenamiento te recomiendo que visites nuestro post: Entrenamiento para preparar una marcha cicloturista. Consejos y advertencias.
La línea que separa el cicloturismo de la competición es cada vez más fina y aunque en más de una ocasión esto ha generado cierta discrepancia es innegable que a un gran número de cicloturistas les sigue atrayendo la vertiente competitiva.
Las marchas cicloturistas cronometradas ofrecen la posibilidad al ciclista de mejorar cada año su marca y esto es un aliciente para todos aquellos que quieran superar su mejor registro. Además los tiempos oficiales de determinadas marchas sirven en ocasiones como carta de presentación ante la grupeta. Dime qué tiempo (marca) tienes en…. y te diré quién eres.
Es importante no confundir el cicloturismo con el ciclismo de competición. Por mucho cronómetro que haya la competición es otra historia, y allí es donde realmente se aprende a rodar en pelotón, a visualizar tácticas de carrera y a gestionar las energías. En cualquier caso de todo esto ya hablaremos en otra ocasión porqué el tema da para hablar largo y tendido.
Por raro que parezca algunos ciclistas siguen disfrutando de la bicicleta de una forma no competitiva. La mayoría de estos cicloturistas gozan del placer de hacer deporte cerca de la naturaleza y de la posibilidad que les ofrece la bicicleta de ver el mundo y el paisaje a baja velocidad. Algunas marchas cicloturistas tienen inscritos solo por la espectacularidad de su recorrido y gracias a las zonas naturales por las que transita la ruta. Sin duda alguna la bicicleta es una magnífica alternativa para conocer los rincones más espectaculares del planeta. Si no fuera por la bicicleta pocas personas habrían conocido los espectaculares pasos de montaña de los pirineos y de los alpes.
Puede parecer una tontería pero del primero al último todos nos fijamos en el interior de la bolsa del corredor. Geles, barritas, propaganda, vales de descuento, bidones, camisetas, maillots….
Cada carrera es un mundo y es imposible encontrar dos eventos con el mismo contenido. Es verdad que nadie se inscribe por un par de geles de más (o eso creo), pero sí que la suma de diferentes elementos puede condicionar que un ciclista repita o no al año siguiente.
Los organizadores son conscientes de ello y por este motivo algunas marchas ya han pasado de regalar los típicos maillots sencillos llenos de publicidad y que terminan olvidados en el cajón a ofrecer maillots de calidad aunque para ello cada ciclista tenga que pagar un pequeño plus.