Carlos Mayo, en una imagen de archivo / EFE
Viajaba desde Zaragoza, donde había corrido el 10k de su Maratón el pasado domingo, hacia Madrid junto a su pareja. Era lunes por la tarde, estaba adelantando a unos camiones por la A-2 a la altura de Calatayud, se despistó y se encontró muy cerca de otro vehículo. Ahí perdió el control, dio un par de vueltas de campana y saltaron los ‘airbags’. Tanto el atleta como su pareja pasaron la noche del lunes en observación en el hospital de la ciudad aragonesa tras presentar algunos hematomas.
Por suerte, fueron dados de alta el martes y, de hecho, este miércoles ya pudo entrenar el corredor maño. No a tope, pero sí espera seguir con su denso calendario. Todo esto lo explicó durante la presentación del Zurich Rock’n Roll Maratón de Madrid en la capital española ante el desconocimiento general.
Allí, salvo sorpresa o que se resienta de los dolores, este domingo correrá la prueba de 10k tras lograr el pasado el Récord del circuito en Zaragoza parando el crono en 29:19. El objetivo principal de Mayo, eso sí, es el 18 de mayo en Londres. En la ‘Night of the 10.000 PB’s’ buscará la mínima para los Juegos Olímpicos de París. Junto a Rober Aláiz y otros atletas.