El de Parets del Vallès analiza Katusha, el único equipo sin presupuesto

'Purito': "El Tour vuelve a la época de Indurain, pero sin Miguel"

Quim Rodríguez huye de una ronda francesa que repesca un ciclismo que no se lleva. Se centrará en el Giro y la Vuelta

Agustí Bernaus

Concentrado en la localidad italiana de Marina di Bibonna, Quim Rodríguez se prepara para conseguir con Katusha su primer triunfo en una gran prueba por etapas.

¿Qué es lo que ha cambiado respecto al año pasado?

Todo. A estas alturas ya tengo definido el calendario hasta el Dauphinè. Y me gusta muchísimo. Pasa por Tirreno, Volta a Catalunya y País Vasco para preparar el Giro. Incluye también una concentración en altura en el Teide.

¿Prefiere Giro y Vuelta antes que el Tour?

No es que lo prefiera,pero el Tour ha hecho un recorrido que no me va bien. Con tanta contrarreloj tengo mucho a perder y nada a ganar. En el Giro y en la Vuelta, si me acompañan las fuerzas y la carrera puedo estar luchando por la victoria. A día de hoy Giro y Vuelta son pruebas mucho más duras que el Tour.

¿Quiere decir que el Tour se ha pasado con casi 100 km contrarreloj?

A mi no me gusta. No sé a que viene esta moda. El día de la crono no habrá nada que ver ni como aficionado ni como periodista.Mirad ese día las cunetas. Estarán vacías. 50 km. de contrarreloj son aburridímos.

Volvemos a los tiempos de Indurain...

Si, volvemos a la época en la que Miguel pasaba a cuatro o cinco de golpe pero sin Miguel, con bicis más aerodinámicas y recorridos más llanos.

¿Por eso han fichado a Menchov?

Es ideal para este Tour. Si está a su nivel rondará el podio. Han hecho un recorrido para Wiggins y Evans, pero a poco que se descuiden Denis puede ganarles la partida. Ha vencido en dos Vueltas y un Giro, aguanta la presión, está motivado y contará con un equipo a su medida.

¿Y usted? ¿Cree que puede ganar el Giro?

Si porque hay poca contarreloj y es durísimo. Hay una `crono¿ por equipos y con el bloque que tenemos en Katusha todavía nos puede beneficiar. La individual, la del último día, se disputará con toda la montaña en las piernas. Este año incluso gané una posición. Cuando vienes de los Dolomitas la última 'crono' siempre hace mucho daño y más que la especialidad, lo que deciden son las fuerzas. Por eso me gusta el Giro. Está muy bien concebido. Cuando quieren realzar un puerto en concreto, por ejemplo, el Mortirolo, te meten antes cuatro mil metros de desnivel. Y entonces los corredores llegan allí, donde está la máxima dureza, muertos. Aquello es espectáculo. Eso no lo hacen en las otras carreras. En la Vuelta incluirán esta vez la etapa de La Gallina, en Andorra, que es una ascensión durísima que conozco muy bien, pero se quedará como un puerto único.

En la última edición muchos estaban seguros de que se impondría.

Yo también, pero las dos caídas me pasaron factura. Fueron tan duras que el médico me dijo que no terminaría. Y acabé gracias a mi forma física.

La tercera punta de lanza del equipo será Freire...

En Katusha han sido muy inteligentes. Este año podrán estar disputando todos los frentes. Oscar está muy motivado y el equipo piensa hacerle una Sanremo de película. No va a sentirse solo. Katusha le recordará más al Mapei que a Rabobank. Se le ve muy contento y el recorrido de la prueba en línea de los Juegos es ideal para él. No creo que se retire este año.

Katusha habrá incrementado notablemente su presupuesto para el 2012...

No, no. Es el único equipo que no tiene presupuesto. Cuando hay una necesidad se pide y ya está. Es el equipo de Rusia y, como tal es prioritario. Tiene una formación continental 'pro, otra continental, otra Sub'23, una femenina... El proyecto global incluye incluso la construcción de velódromos.

También han mejorado la cúpula...

Con la llegada del exmánager de Gerolsteiner, Hans-Michael Holczer, ha cambiado todo. En la concentración hemos hecho unos 'test' biomecánicos que jamás había visto. Directores, médicos, osteópatas, preparadores, un cocinero y una programación impresionante en la que se nos marca hasta el horario. Se ha impuesto un régimen alemán, de una rigurosidad absoluta.