El uso de CBD dentro del entorno deportivo no es ninguna novedad, desde hace varios años, sus propiedades son aprovechadas para reducir el tiempo de recuperación de los deportistas después de someterse a entrenamientos de alto impacto o que requieren grandes esfuerzos.
Teniendo en cuenta que durante el ejercicio los tendones, músculos y articulaciones sufren pequeñas lesiones que delimitan el punto máximo de resistencia y que su corrección depende de la capacidad de recuperarse, las flores CBD representan un importante aliado en el tratamiento de dolores y procesos inflamatorios.
Si bien todavía queda mucho por descubrir, hasta el momento, las investigaciones arrojan una interacción directa entre el CBD y los receptores cannabinoides. Para ser más exactos, el compuesto activa los receptores CB1 y CB2.
De esta forma, una vez que entra en el organismo produce una serie de reacciones que favorece las funciones del sistema endocannabinoide.
Asimismo, otros estudios clínicos han descubierto que la sustancia química de la planta Cannabis sativa incide sobre el receptor TRPV1, el cual condiciona la forma de respuesta del cuerpo frente al dolor y la inflamación. Gracias a estas interacciones, el CBD puede considerarse:
Analgésico: la sustancia neutraliza la respuesta al dolor, por lo que disminuye o elimina las molestias, de esta manera, brinda alivio frente a los dolores crónicos y mejora la experiencia durante los siguientes entrenamientos.
Antiinflamatorio: considerando que los músculos de los deportistas se inflaman regularmente, las propiedades antiinflamatorias son especialmente valorados, ya que prescinden de la necesidad de ingerir ibuprofeno y otros fármacos que provocan reacciones secundarias en el organismo.
Anti-náuseas: la sensación de mareo y las náuseas suelen ser dos respuestas habituales del organismo ante el esfuerzo físico que implican los entrenamientos de alta intensidad. Los especialistas en el tema coinciden en la efectividad que tiene el CBD para frenar las ganas de vomitar.
Antioxidante: el CBD acelera el proceso de recuperación del cuerpo, lo que, a su vez, influye no solo en la reducción del cansancio, sino que previene la aparición de las molestas agujetas posteriores al entrenamiento.
Los estudios que analizan los efectos del CBD no se detienen. Entre tantos ensayos clínicos existe uno que despierta la atención y es el vínculo que existe entra la sustancia y la anandamida, el cannabinoide que el organismo sintetiza de manera natural, y es el encargado de interactuar con los receptores CB1, CB2 y TRPV1.
En la práctica deportiva, la anandamida se encarga de generar el denominado “subidón del runner”, es decir, el estado de euforia que deja una sensación de tranquilidad y relajación, mientras que el CBD está asociado a la ralentización de su descomposición.
Actualmente, podemos encontrar diferentes formas de aprovechar las propiedades del CBD, todo depende de las formulaciones reguladas en cada país. Sin embargo, las opciones más comunes son:
Los denominados cogollos de cáñamo son los brotes de la planta de cannabis caracterizados por su alto contenido de cannabidiol y mínimo nivel de tetrahidrocannabinol (THC). En este sentido, carecen de las propiedades psicoactivas de las flores de marihuana recreativa.
La mayor parte de los especialistas en suplementación deportiva se han dado a la tarea de formular productos a base de CBD diseñados para optimizar el rendimiento y favorecer la recuperación.
Se consideran la opción más sencilla de sacar provecho a los beneficios de la sustancia, ya que permiten controlar la ingesta diaria gracias a su presentación en dosis premedidas. Se recomiendan para quienes buscan un formato de consumo preciso y discreto.
Sin duda, por su acción casi instantánea, la forma líquida es la opción preferida entre los consumidores. Las gotas se colocan debajo de la lengua, lo que facilita su absorción mediante las membranas de las mucosas. De igual modo, es posible ingerirlas disueltas en alimentos o bebidas.
Otras presentaciones que vienen cobrando fuerza entre los deportistas y consumidores en general, son las gomitas. Además de tener un sabor agradable, vienen con dosis preestablecidas que simplifican la ingesta. Algo similar ofrecen los chocolates, galletas, infusiones y bebidas energéticas.
La aplicación tópica está indicada para tratar dolores y molestias en zonas localizadas. Normalmente, brindan alivio rápido a las condiciones musculares, pero también promueven la recuperación y tienen efecto antiinflamatorio.