Pogacar, siempre Pogacar. Solo ha necesitado dos etapas para demostrar quien manda en la Volta y sentar las bases para su victoria final en su debut en la ronda catalana.
Vallter es un puerto de categoría especial que llega a los 2.150 metros y que se ha convertido en toda una referencia para el cicloturismo. Sus más de 11 kilómetros de ascenso desde Setcases con un desnivel medio del 7,6% hacen las delicias de los aficionados.
Terreno ideal para Pogacar que hizo de las suyas -pese a las duras condiciones climáticas- arrancando y avisando desde muy lejos ya en un aperitivo de lo que podía venir más adelante.
Una vez ya metidos en la parte decisiva, en plena subida de Vallter, con un Almeida todopoderoso (y muy pocas unidades de ciclistas ya detrás de él) arranca la bestia Pogacar a falta de poco más de 6 kilómetros.
Las radios se apagan porqué ya no hay nada que decir, la etapa es suya.
Mientras por detrás se desataba una guerra (Landismo!!!) el esloveno de 25 añitos culminaba ‘a su rollo’ su exhibición en solitario en las últimas rampas de Vallter.
Una vez cruzada la meta, Pogacar seguía divirtiéndose, marcándose unos selfies con los presentes.
I am cold as ice (right now) reza su actividad en Strava, que en el momento de la publicación de este artículo ya acumula la barbaridad de 45.000 kudos (likes) y más de 400 comentarios.
En ella te puedes deleitar desgranando su actuación tramo a tramo, como por ejemplo el segmento denominado “Vallter – parte dura” que salva 584m de desnivel en 7km en tan solo 19:24, rebajando prácticamente en un minuto el anterior KOM (récord).