En el mundo del ciclismo cuidar cada detalle es clave para llegar a lo más alto. Uno de ellos es el mantenimiento y la revisión de la bicicleta, aspecto que decidió revisar el tetracampeón del Tour de Francia, Chris Froome.
Así, el británico se dio cuenta de que debía cambiar la configuración de su bicicleta unos cuantos centímetros, ya que esto podría estar detrás de su bajo rendimiento.
Froome explicó a Cyclingnews que comparando una de las bicicletas que usó durante su período con el Team Sky descubrió que: “Desde el sillín hasta el manillar, era de más de tres centímetros de diferencia entre las dos bicicletas, más largo en la bicicleta actual”.
Después que Froome fuera a un especialista, pudo arreglar las deficiencias en su bicicleta respecto a la posición en ella. “En cuanto a la altura del sillín, en cuanto al alcance, es realmente mucho, no estamos hablando de milímetros”.
Ante sus declaraciones, mucha gente reaccionó escéptica como el ex ciclista profesional danés, Michael Rasmussen que no se creyó las palabras del corredor del Israel – Premier Tech.
Y añadió que Froome estaba mintiendo, ya que cualquier profesional que haya hecho cientos de kilómetros se da cuenta de su posición en la bicicleta.
Otros han afirmado también que dentro del Team Sky los corredores podían notar la diferencia de centímetros mientras pedaleaban.