“Empecé a entrar en pánico. Tenía miedo de cada curva”

Publicado por
Tomás Aguirre
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Enric Mas vivió un Tour desastroso como líder del Movistar. Sin embargo, la causa no fue su estado de forma, sino su miedo a las bajadas.

Originalmente acuñado por el golfista Tommy Armour para describir una pérdida repentina e inexplicable de la capacidad de hacer putt correctamente, el término Yips se amplió más tarde para aplicarlo a cualquier pérdida inexplicable de habilidad y se ha aplicado a atletas en una amplia variedad de deportes.

Los síntomas de los yips son la pérdida de habilidades motoras finas y problemas psicológicos que afectan la memoria muscular y la toma de decisions, dejándolos incapaces de realizar las habilidades básicas de su deporte.

Enric Mas, el valiente ciclista que nos impresionó en la Vuelta de 2018 con tan solo 23 años finalizó de manera brillante la temporada 2022, siendo segundo en la Vuelta a España, por detrás de Remco Evenepoel, con victoria en el Giro dell’Emilia, y subcampeón en Lombardía por detrás de Tadej Pogačar. Aunque la antesala a esos logros “fue un desastre”, como lo ha calificado el propio Mas en una entrevista en cyclingnews, donde explica al detalle la pérdida de confianza que sufrió en los descensos durante el pasado Tour de Francia y cómo logró reponerse.

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A pesar de llegar al Tour en un buen estado de forma, Enric Mas describe el bloqueo que sufrió en las bajadas “como si estuviera andando en bicicleta por primera vez”. El ciclista del Movistar identifica tres caídas previas durante la temporada que desencadenaron ese miedo: en Tirreno-Adriatico, en el País Vasco y en la Dauphiné.

“Empecé a entrar en pánico. Apenas podía controlar mi bicicleta”

Aborda lo que sintió en las etapas de los Pirineos, camino a Foix y en los descensos del Aubisque y Spandelles hacia Hautacam. “Las dudas se meten en la cabeza y luego se apoderan de ti. Tu cabeza te dice que tienes que frenar al entrar en las curvas que puedes atravesar a 80 km/h. Es difícil de explicar”.

“El tiempo que estaba perdiendo pasó a ser secundario para mí. Lo importante era mi seguridad, porque había momentos en los que ya casi no podía controlar mi bicicleta”.

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Mas acabo abandonando el Tour el día después aunque por COVID-19. “En ese momento, el Tour era casi irrelevante para mí. Quería terminar y me molestaba no hacerlo, pero ya estaba pensando en la Vuelta”.

“Repetir las bajadas, luego parar y mirar. Volver a subir y hacerlo de nuevo”

A partir de entonces, Mas se puso en manos de una psicóloga y un entrenador experto en descensos para revertir la situación.

“Después del Tour, desconecté durante unos días y luego me puse a trabajar”. “Hubo un mes entre el Tour y la Vuelta y fue un mes de mucho trabajo. El psicólogo y el experto en descensos y mi entrenador trabajaron de la mano y me ayudaron mucho”.

“Andorra está llena de montañas y cada vez que subes hay que bajar. Se trataba de repetir las bajadas, luego parar y mirar cómo las montabas, qué hacías bien y qué hacías mal. Luego volver a subir y hacerlo de nuevo”.

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“Cuando pierdes la confianza en ti mismo, tienes que recuperarla, y una gran parte de eso es la técnica: cómo abordar las esquinas, cómo distribuir tu peso. Poco a poco, le dimos la vuelta”.

“Todo el equipo trabajó con él, sobre todo para apoyarlo psicológicamente, porque creo que es lo que más necesitaba”, comenta su compañero José Joaquín Rojas en el amplio reportaje de Cyclingnews.

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Tomás Aguirre