Ante todo, su recuerdo de ciclista es muy amable: el de un tipo simpático, combativo y con ese don de gentes que no dejaba indiferente prácticamente a nadie.
Descubrió que podía ser un buen sprinter y vaya si lo fue.
La prueba está en su currículum que, entre otras cosas, le permitió ser campeón de España, ganar el GP Miguel Indurain a Laurent Jalabert o la Clásica de San Sebastián en 2004 frente a Paolo Bettini (una carrera que yo, personalmente, tengo grabada en la memoria).
Fue Miguel Ángel Martín Perdiguero un buen ciclista, en definitiva.
Un tipo que supo ganarse el sueldo, que no quería contratos largos, que preferiría ir año a año: apostaba por la confianza en sí mismo por delante de la estabilidad para ganar más dinero.
Fue su manera de ser y su mérito es que supo administrarla y en todos los años que estuvo de ciclista casi siempre ganó algo.
Pero sobre todo fue un tipo que se hizo de querer y, de hecho, es difícil encontrar a alguien de su época que no te hable con cariño de ‘El Perdi’
Un espíritu aventurero que no paraba quieto en clase y que fue uno de los capataces de la banda de La Covatilla que luego se fotografió desnuda para la revista ‘Interviu’.
Porque, como aún dice él en las entrevistas, “¿quién no quiere tener en esta vida una banda?”
Y la suya fue de ciclismo.
“Se habla mucho de aquello de Interviú y creo que fue sonado por ser los primeros deportistas que salimos desnudos en esa revista”, recordóen su momento.
“La realidad es que salimos porque estábamos Aitor González y yo en la playa, súper negros, finos, entrenando y paramos a tomar algo en la playa. Y comentamos que esos cuerpos estaban para enseñarlos. Montamos en el avión, llegó Horrach, que venía de correr la Volta a Portugal, y le preguntamos si quería salir en pelotas en el Interviú. Aceptó. Luego en la Vuelta hablamos con cuatro amigos más como Sevilla, con Guti (Quique Gutiérrez), con Valverde y hablamos con la revista. Ellos encantados. Salimos amigos. Recuerdo que al día siguiente de salir se agotó”
En realidad, vivió muchísimo Miguel Ángel Martín Perdiguero que un año hasta compartió equipo con Mario Cipollini que, por encima de ciclista, fue personaje (un personaje total: todavía lo es).
Perdiguero no llegó a esa categoría en ningún caso, pero hoy es un hombre que se dedica a la política en su localidad natal en Madrid (San Sebastián de los Reyes) y que llegó a participar en Supervivientes (Tele 5).
Ahora es vicealcalde, pero antes fue durante ocho años concejal de Deportes en los que siempre dejó claro que “la política es más dura que el ciclismo” y que él la vive como vivió su época de ciclista: las 24 horas del día.
Del político ya no sé tanto como del ciclista. Pero entiendo que si está a su altura sería buena noticia para la ciudadanía de San Sebastián de los Reyes.
Y ése es un examen que se supera cada día.