Este martes cumple 17 años

Comienza la cuenta atrás de Seung Woo Lee

Seung Woo Lee sabe que aún le quedan unos meses sin poder ser feliz del todo. Pero también sabe que justo dentro de un año todo habrá acabado

Muchos comparan a Lee con Messi. De momento, tiene que conformarse con hacerse fotos con él

Muchos comparan a Lee con Messi. De momento, tiene que conformarse con hacerse fotos con él / sport

Josep Capdevila

Seung woo Lee no es bueno. Es muy bueno. Miren si lo es que consiguió algo histórico: que Andoni Zubizarreta rompiera su norma de no ir nunca a ver un partido del fútbol base del Barça, para ir a ver un día un encuentro donde jugaba el coreano. Tanto le habían hablado los técnicos del club de ese joven jugador que decidió irle a ver. Solo aguantó la primera parte del partido, es cierto, pero por lo menos hizo el esfuerzo.

Es tan buen jugador Lee, que dentro del club hay que piensa que si se les denunció a la FIFA por el tema de la contratación de jugadores menores de edad es por el miedo que hay en otros clubs de que si existe la reencarnación de Leo Messi sea en su persona. Incluso dentro de la guerra entre Corea del Norte y Corea del Sur, los del Sur creen que fueron los del Norte quienes denunciaron al Barça por "culpa" del joven delantero.

Rumores y especulaciones a parte, lo cierto es que en el FC Barcelona desde hace un par o tres de años se tiene la convicción de que Lee es el jugador más "especial" que hay en el fútbol base. Todo se puede torcer en esta vida, pero Seung woo Lee ilusiona en la Ciutat Esportiva. Y mucho que ilusiona.

Pero Lee es una de las víctimas de la sanción de la FIFA al Barça. Sin que él tenga ninguna culpa, la realidad es que no puede jugar ningún partido con sus compañeros. Y así lleva ya unos cuantos meses, más de un año. Se tiene que conformar con entrenar y jugar con su selección, la de Corea del Sur, de la que es el líder indiscutible. Esta temporada entrena regularmente con el juvenil A de Jordi Vinyals y por lo menos vive el ambiente futbolístico y disfruta al lado de sus compañeros.

Este martes, 6 de enero, es el cumpleaños de Lee. Cumple 17 años. Y ahora por lo menos ya tiene una cosa segura. Su cuenta atrás ha comenzado. Le faltan "solo" 364 días para que su pesadilla se acabe y pueda volver a jugar a fútbol. El 6 de enero del 2016 cumplirá los 18 años y ya no tendrá impedimientos legales para poder demostrar lo buen jugador que es.

La gran duda es el daño que le puede provocar tanto tiempo sin competición. Está claro que le costará coger el ritmo cuando vuelve a jugar, porque no es lo mismo el entrenamiento más duro que pueda haber que la intensidad de la competición. Pero, ¿cuánto tardará en adaptarse? ¿Se habrá estancado su progresión? Sin tener que hacer comparaciones con nadie, pero ¿será ese jugador desequilibrante que demostraba ser cuando podía jugar con asiduidad? Dentro de un año tendremos las respuestas.