Antoni Guil: "Confiamos que la campaña de estas elecciones sea constructiva"

Antoni Guil, presidente de la Confederación Mundial de Peñas

Antoni Guil, presidente de la Confederación Mundial de Peñas / SARA GORDON

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La dimisión de la junta directiva presidida por Josep Maria Bartomeu pone fin a una etapa que ha conllevado una importante transformación para el movimiento de peñas barcelonistas, siendo uno de sus principales hitos la creación de la Confederación Mundial de Peñas del FC Barcelona. Su presidente, Antoni Guil, hace balance de la evolución del movimiento durante los últimos diez años y valora las perspectivas de futuro.

¿Cuál es su mensaje a la junta directiva que deja el Club?

Sobre todo, de agradecimiento. Si algo han demostrado durante su mandato, es su convicción para fortalecer y modernizar el movimiento de peñas. La creación de la Confederación Mundial de Peñas, en 2015, ha supuesto un antes y un después para nosotros, y nos ha permitido realizar una gestión mejor estructurada y más cercana a cada una de las más de 1.270 peñas que tenemos en el mundo. Esto nos ha permitido crecer tanto cuantitativa como cualitativamente, con una más que notable presencia a nivel internacional.

Hay quien dice que las peñas han estado al lado de esta junta sin hacer demasiada crítica...

Las peñas siempre estamos al servicio del Barça y así lo hemos demostrado en nuestros más de 100 años de historia. Todas las juntas directivas, en su gestión, tienen luces y algunas sombras. Nuestra misión, reitero, es estar al lado del Club, realizando, cuando corresponda y así lo hemos hecho internamente, una crítica constructiva. Nuestro movimiento es plural, heterogéneo, pero nos une el sentimiento de pertenencia y la voluntad inequívoca de trabajar para que el FC Barcelona sea el mejor Club del mundo.

Cuando habla de luces y sombras, ¿qué destacaría en cada uno de estos aspectos?

Yo destacaría la labor desarrollada en el ámbito social. Nosotros mismos, como organización, hemos recibido un gran apoyo durante todos estos años, lo que nos ha permitido avanzar en la modernización del movimiento de peñas. El reconocimiento en los estatutos del Club y la representatividad en la asamblea de compromisarios son un claro ejemplo de ello. La grada de animación, FCB Viajes, el gran impulso del deporte femenino, la reorientación y la labor de la Fundación –de la que peñas forma parte del patronato–, la evolución del proyecto Espai Barça ya iniciado, y, evidentemente, los títulos conseguidos en todos estos años son evidencias de la gestión realizada.

Por el contrario, podemos coincidir en que la política deportiva seguida en el último tramo de mandato no ha sido la adecuada, lo que sumado a cuestiones como la gestión de las redes sociales ha producido el deterioro de la confianza de nuestra masa social.

Se cierra una etapa y se abrirá una nueva. ¿Cómo afronta la Confederación las próximas elecciones a la presidencia del FC Barcelona?

Tal y como he dicho, al servicio del Barça, posibilitando que el mensaje de las diversas alternativas llegue a todo el barcelonismo. Confiamos que los candidatos realicen una campaña propositiva y constructiva. La unidad del barcelonismo no es una expresión retórica, es nuestra premisa y más en el momento que vivimos. Todas las alternativas deben buscar, desde el respeto a las diferencias, el consenso; primar lo que une y nos fortalece. Como colectivo tenemos el compromiso de escuchar a todos los candidatos y de abrir nuestras organizaciones para explicar su proyecto. Ya lo hicimos en las anteriores elecciones cuando acabábamos de constituirnos como Confederación.

Queremos que los proyectos para peñas sean coherentes con todo lo trabajado durante estos últimos años, ya que estamos aquí para sumar. Somos más de 1.270 entidades en todo el mundo, con más de 171.000 peñistas, de los que entre el 10-12% son socias y socios del FC Barcelona. Tenemos mucho que ofrecer.

¿Tienen alguna candidatura preferida?

No. La Confederación –y yo mismo, por principio– no se posiciona a favor ni en contra de ninguna candidatura. Es evidente que cada uno puede tener alguna preferencia a nivel individual, pero el movimiento de peñas es plural y debemos respetar todas las opiniones y opciones de nuestros miembros. Cada peñista con derecho a voto tiene absoluta libertad para votar en conciencia, y nuestra función es facilitar a estas socias y socios la máxima información.