Monchu cumple un sueño y es el primer canterano que debuta con Setién

A lo grande. Así fue el debut oficial de Monchu Rodríguez con el primer equipo del Barça. Se hizo esperar, pero al final llegó y se hizo justicia. Además, no un día cualquiera, sino en los octavos de final de la máxima competición continental. Para recordarlo toda la vida.

El debut de Monchu es la recompensa al trabajo y la constancia. Desde que con solo cinco años empezara darle patadas a un balón en la cantera del CIDE, en su Palma natal, antes de recalar en el Mallorca. Llegó al Barça en 2012 para jugar en el infantil ‘A’ que en aquel momento dirigía Denis Silva. Desde el primer momento sorprendió para bien su espíritu competitivo, sus enormes ganas de llegar muy lejos en el mundo del fútbol. Sobre el césped transmite carácter y liderazgo, pero también grandes dosis técnicas, y sobre todo, tácticas. Es el centrocampista que todo entrenador quiere tener por su polivalencia, tanto en el pivote como en el interior, y su capacidad de leer los partidos. 

Si a todo ello le unimos que tiene gol hasta convertirse en el máximo artillero del filial con diez dianas y que tira las faltas y los penaltis con precisión, tenemos a un futbolista de 20 años con un futuro inmenso por delante. Ya sea en el Barça o traspasado a alguno de los numerosos clubs que le desean, siempre y cuando, como informamos en SPORT, se guarde la entidad azulgrana una asequible opción de recompra.

"Un momento único"

Quique Setién llegó al Barça con la cantera como declaración de intenciones, y en su primer partido, ante el Granada en el Camp Nou (1-0), hizo jugar a ocho futbolistas que se habían formado en La Masia, seis de ellos como titulares. Ansu fue de la partida y también tuvo minutos Riqui Puig. Después contó en alguna ocasión con Collado y con Araujo, pero todos ellos ya habían debutado con Ernesto Valverde. Su primer debutante procedente de la cantera, por lo tanto, es Monchu Rodríguez, un futbolista que calificó su estreno de “un  momento único., un sueño hecho realidad. El camino continúa”, escribió el balear en sus redes sociales

Riqui, a la espera

Riqui Puig ha jugado trece partidos de Liga y dos de la Copa del Rey. No está mal, pero le falta algo muy deseado por el centrocampista desde que era niño: estrenarse en la Champions League. No lo ha podido hacer en la eliminatoria de octavos de final ante el Nápoles, en la que fue suplente tanto en San Paolo como en el Camp Nou.

Espera formar parte de la expedición que viaje a Lisboa y tener minutos en la máxima competición continental. Riqui fue titular en los últimos tres partidos de LaLIga y Quique Setién elogió al canterano en más de una ocasión. Pero ante los partenopeos tampoco fue su momento, cuando incluso se especulaba con su titularidad. Habrá que esperar un poco más para ver a Riqui haciendo diabluras en Europa.