Analizamos la Garmin Vivosmart 4, una avanzada pulsera de actividad que pretende ayudarnos a mejorar nuestra condición física mediante el complemento de moda o marca de estilo que es este wearable. Con un precio de salida de 139,99 € viene para dar guerra. Aquí podéis seguir su oferta:
Para cumplir dichas expectativas, esta cuarta versión de Vivosmart llega con un nuevo diseño y con nuevas y sorprendentes funciones que ya querría el recientemente presentado Garmin Instinct, como el pulsioxímetro basado en las mediciones de la muñeca que te permite estimar la saturación de oxígeno en sangre, o el el monitor de energía Body Battery te permite saber cuándo estás preparado para ponerte en marcha o cuándo necesitas descansar.
Esta versión se ha afinado y es más llevable, entrando más en el campo de los complementos de diario. Podrás comprarla en cuatro colores distintos con diferentes tonos en el bisel.
• Diseño novedoso que incluye por primera vez detalles metálicos
• Control del sueño con fase MOR (movimientos oculares rápidos, también conocido como REM) y con registro de los niveles de oxígeno mediante el sensor Pulse Ox en la muñeca (pulsioxímetro)
• Seguimiento detallado de la actividad física diaria gracias al monitor de frecuencia cardíaca, monitor de estrés, valoración del VO2 o el monitor de energía Body Battery.
• Apto para entrenamientos y actividad en piscina además de caminata, carrera, fuerza, etc.
• Notificaciones de tu smartwatch y posibilidad de respuestas programadas, para Andorid.
• Hasta una semana de autonomía
El pulsioxímetro es como decíamos una de las sorprendentes novedades de esta unidad. Con esta herramienta nos será posible entender cómo absorbe oxígeno nuestro organismo. Además nos será posible activar esta funcionalidad durante el seguimiento del sueño, por lo que la información y el resumen de nuestra noche resultará más interesante por sumar este dato al seguimiento de las fases de sueño ligero, profundo, MOR y movimiento durante la noche.
En cuanto al Body Battery, trata de optimizar la energía de tu cuerpo combinando datos de estrés, variabilidad de la FC (VFC), sueño y actividad; así calcula la reserva de energía para poder acertar más en la planificación de entrenamiento y descanso. No deja de ser una herramienta útil cuando no controlamos demasiado bien nuestras sensaciones de fatiga o no estamos habituados a identificar el cansancio.
El monitor de estrés se basa en el seguimiento del intervalo de tiempo entre cada latido, y te avisa mediante vibración y un mensaje para alertarte de que debes relajarte. También cuenta con una herramienta de relajación mediante técnicas de respiración para bajar el nivel de estrés.
Garmin Vivosmart 4 me ha sorprendido positivamente, tanto por sus nuevas prestaciones (Body Battery y el sensor de oxígeno Pulse Ox) propias de un reloj de alta gama como por su atractivo diseño, aunque en esto último todo es subjetivo. Para mí es un acierto la evolución en el diseño.
El precio es otra de los aspectos que realmente pueden hacer a esta pulsera competente en el mercado, ya que sus competidores vienen a ofrecer menos por el mismo precio, o lo mismo por un precio mayor. Quizá se echan de menos algunas funciones que podrían hacer más atractiva a esta pieza como la reproducción de música que sí ofrece por ejemplo la Samsung Gear Fit 2 Pro o el pago contactless, si bien es otro concepto de pulsera más hacia el reloj de entrenamiento. La sencillez de la pantalla también es un tema a debate, pero es táctil (que no es poco) y que no sea a color se puede perdonar.
Vivosmart 4 responde al concepto puro de pulsera inteligente, basando su información en sensores como el acelerómetro y sin montar antena GPS. Si tus pretensiones son un seguimiento general (aunque bastante certero) de tus actividades y un buen monitor del sueño, esta puede ser tu opción. En cualquier caso siempre tienes la opción de vincular a esta pulsera el GPS de tu teléfono para casos puntuales.
En definitiva, una pulsera con muy buenas prestaciones a un precio muy competitivo. Totalmente recomendable.