Quizás no se ha podido apreciar tanto desde la retransmisión, pero lo cierto es que sobre el terreno el estado de la pista del estadio Juan de la Cierva de Getafe ha dado mucho que hablar. Entre bastidores han sido varios los y las atletas que se han quejado de la peligrosidad de algunos de los carriles. El detonante se ha producido en la final de 3.000 obstáculos. Dani Arce ha tenido que frenarse y Jorge Blanco también ha tenido muchos problemas a lo largo de la prueba. De hecho, ninguno de los dos ha podido acabar la prueba por los continuos resbalones (sobre todo al salir de la ría) en una pista muy dura y en la que los clavos no se adherían nada bien (“parecía de cristal”, han comentado).
Katir ha pensado en retirarse
También se ha quejado de ello en zona mixta Mohamed Katir, que incluso ha comentado que “he estado a punto de retirarme porque estaba poniendo en riesgo mi sueño, el de los Juegos Olímpicos, con una pista en estas condiciones. Intentar ir rápido era muy peligroso”.
Otro que ha sido contundente (como se puede apreciar en el vídeo adjunto) ha sido Rober Alaiz, que ha sido quinto (8:44:32) en el 3.000 obstáculos y ha respaldado a su compañero y amigo Dani Arce: “A Katir no le he visto porque estábamos calentando. Sobre Dani, he visto en la pantalla que ya no estaba. Si le llego a ver me hubiera frenado totalmente porque era el más fuerte hoy, es de mis mejores amigos y era su día. Siempre llegan muy juntos Carro y él y hoy era su día. Desde aquí voy a decir que no es culpa suya, ni mucho menos. No sé de quién es la culpa, pero seguro que de los atletas no. Mucho compañeros se están jugando su presencia en los Juegos, yo no, pero se han jugado una lesión por culpa de la organización, la federación o el organismo competente que haya organizado esto”.
