El equipo INEOS se ha reunido este fin de semana en Viena para hacer un ensayo y empezar a preparar el terreno para la llegada del plusmarquista mundial de maratón Eliud Kipchoge, que intentará el próximo 12 de octubre en la capital austríaca bajar de las dos horas en maratón, algo que no ha logrado jamás ningún ser humano.
Quedan exactamente 40 días para que el keniano afronte su mayor desafío y el equipo INEOS (sin Eliud, concentrado en el training camp de Kenia para llegar en el punto óptimo a la cita) ha viajado como comentábamos al escenario del reto para ultimar detalles y probar aspectos como el clima, el terreno, la sincronización de las liebres, la operativa de televisión, etc. Hablando de liebres, muchas de las que tendrá Kipchoge en el DÍA-D acudieron también a este encuentro, entre ellas el campeón del mundo de 1.500 y 5.000 Bernard Lagat, los australianos Jack Rayner y Brett Robinson o el campeón de los Juegos Commonwealth Augustine Choge.
“Un desafío con mucho trabajo detrás
Fran Millar, CEO del equipo INEOS, ha comentado sobre el test de este fin de semana que “este desafío es para ayudar a un hombre a hacer historia, para hacer algo que nunca antes se ha hecho y eso conlleva mucho trabajo. Tenemos alrededor de 150 personas implicadas para que todo salga bien. En solo 40 días estaremos aquí de nuevo e intentaremos que sea perfecto”.
Valentijn Trouw, manager de atletas de Global, ha afirmado que “traer a atletas de primer nivel para el test de este fin de semana ha sido muy especial. Todos los atletas que han venido y los que no han podido hacerlo están muy ilusionados con poder hacer de liebres y participar en todo esto. Para ellos, correr 5 o 10 kilómetros y ayudar a Eliud a lograr bajar de dos horas no es fácil y deben trabajar duro. Lo positivo es que se ha trabajado muy bien y en las próximas semanas se pulirán todos los detalles.
Una de las liebres, el legendario Bernard Lagat, ha comentado que “la razón de que hayamos venido este fin de semana aquí ha sido para conjuntarnos y para conocer el terreno, las transiciones y demás. Kipchoge está seguro de sí mismo y confiado en que las liebres lo haremos a la perfección”.
