Los escandinavos están hechos de otra pasta. Sobre todo cuando de frío, nieve y correr se trata. Desde Noruega nos ha llegado la historia de un Récord Guinness de lo más variopinto…y sufrido. El youtuber y runner Jonas Felde Sevaldrud ha compartido una hazaña que le ha convertido en el hombre más rápido sobre la faz de la tierra en correr un medio maratón descalzo sobre nieve o hielo. Como ya sabéis, hoy en día prácticamente hay plusmarcas en cualquier distancia, modalidad y condiciones. Sevaldrud completó los 21 kilómetros en un circuito de varias vueltas y en un tiempo de 1:44:48. La anterior plusmarca era del holandés Wim Hof que en 2007 lo había logrado en 2:16:34. Y es que la ‘aventura’ se las trae. Pocos serían capaces de aguantar en condiciones tan sumamente extremas durante casi dos horas corriendo.
Una hazaña muy sufrida
El noruego, que colgó su hazaña en un vídeo de Youtube, asegura en el mismo que comenzó a correr descalzo después de leer el libro ‘Born tu Run’ de Christopher McDougall. Durante la pandemia decidió dar este vuelco a su vida y y correr de esta forma minimalista. El problema: que en Noruega la superficie está nevada buena parte del año. De esta forma, había que acostumbrar los pies a estas condiciones de temperaturas gélidas y, sobre todo, habituar la planta del pie.
Asegura que comenzó a correr tests de 5k y que se dio cuenta de que hacerlo descalzo sobre hielo y nieve no era tan ‘jodido’ como había presupuesto. Y ahí se planteó romper este Récord Guinness de Hof, que lo logró en Finlandia. “No solo quiero rebajar su marca, quiero destrozarla”, comenta antes de ponerse las mallas y el cortavientos y ponerse a trotar.
Al segundo intento
El problema es que este joven noruego no tenía suficiente bagaje corriendo descalzo sobre nieve y ya al término de la primera vuelta terminó con los pies llenos de callos y rozaduras. De hecho, cuando acaba el desafío su pie es todo un poema. Según cuenta el nuevo Récord Guinness, hubo un primer intento fallido al estar la superficie muy dura, helada, y sus pies quedar totalmente ‘noqueados’ tras el primer 10k. En este segundo ataque, el hecho de que la nieve estuviera blanda ayudó a aguantar.
