Menudo lío en Etiopía con el asunto de los trials olímpicos y de la presencia de Kenenisa Bekele. El considerado por muchos mejor fondista de todos los tiempos ha rechazado participar en la prueba clasificatoria olímpica de maratón (de 35 kilómetros y a casi 2.500 metros de altura en una localidad cercana a la capital Addis Abeba). Ha desmentido que sea porque no está en forma para afrontarla. Al contrario, el poseedor de la segunda mejor marca de la historia en la distancia de Filípides cree que hay demasiado poco margen luego para preparar la carrera que se disputará en Sapporo el próximo 8 de julio, que es demasiado peligroso y que puede sufrir alguna molestia.
Y es que en el seno del equipo etíope hay lío porque inicialmente la Federación comunicó que representarían al país africano (candidato a medallas de todo tipo de colores) los que tuvieran las tres mejores marcas dentro del periodo estipulado de clasificación. Kenenisa no corre desde Londres 2019, cuando paró el crono en 2:01:41, a solo dos segundos del Récord del Mundo de Eliud Kipchoge, su compañero de equipo en el NN Running Team. Obviamente nadie en su país estaba por encima de él.
Sin Legese ni Wasihun
El problema es que un tiempo después la Federación anunció que finalmente sí habría una prueba (iba a ser en Ginebra, Suiza, pero finalmente por el COVID será este fin de semana en Etiopía) clasificatoria para asegurarse de que los seleccionados estaban en forma.
Tampoco estarán los otros dos etíopes con mejores marcas personales, Birhanu Legese (tercera mejor marca de la historia con 2:02:48) y Mule Wasihun con 2:03:16). Bekele quería hacer historia y convertirse en el primer atleta capaz de ganar el oro en 10.000 y en maratón en los últimos 69 años. Veremos si el pulso le sirve para algo y la federación recapacita, pero parece complicado…
