¿Quién no ha oído hablar del óxido nítrico y de sus fabulosas propiedades para el rendimiento deportivo y… otros tipos de rendimientos? Si no lo conoces no dejes de leer nuestro artículo sobre esta molécula.
Normalmente se habla de suplementación exógena (comer pastillas) para aportar el óxido nítrico a nuestro organismo. Sin embargo hoy te propongo una fuente deliciosa y natural, una receta rica y casera con la que podrás obtener un buen aporte de óxido nítrico.
No solo os voy a explicar cómo prepararlo, sino que os voy a contar las propiedades de cada ingrediente, así como las precauciones que debemos tener para entender que, como en todos los ámbitos de la vida, no debemos abusar de nada.
¿Qué vamos a necesitar para nuestra pócima?
Es una de las frutas con la más alta concentración de polifenoles (punicalaginas) al mismo tiempo que una excelente cantidad de vitaminas hidrodrosolubles, liposolubles, y minerales.
Se lo añadimos para aportarle un extra de dulzor así como antioxidantes, vitaminas y minerales, que al mismo tiempo ayudan a asimilar mejor el óxido nítrico.
Aporta una buena cantidad de ácidos grasos omega 3 que ayudan al correcto funcionamiento neuronal, siendo un protector cardiovascular, intestinal, y que ayuda a la asimilación de vitaminas liposolubles, entre otros.
Además contiene fibra hidrosoluble que mejora el tránsito intestinal y posee vitaminas y minerales.
Lo ideal es consumir unos 500 ml de este jugo al día para obtener los beneficios esperados. Y los mejores momentos serían antes del ejercicio (al menos unos 90-60 minutos previos) o incluso mejor después como recuperador.
El consumo de remolacha puede ocasionar orinas y heces color rojizos, que desaparecen unos 2-3 días tras suprimir la ingesta de la misma. En caso de persistencia de esta coloración en dichas secreciones, consulta a tu médico para descartar hemorragias digestivas y/o renales.
La remolacha contiene altas cantidades de oxalatos (aunque se reducen tras la cocción y deshecho del agua) que pueden provocar formación de cálculos renales así como irritación gástrica en las personas predispuestas. También interfieren con la absorción de calcio y hierro, por lo que no se recomienda combinar productos lácteos ni cárnicos (o complementos de hierro) en la misma ingesta.
Hay que decir que un exceso de fructosa ingerida de forma líquida, puede provocar irritaciones gastrointestinales, así como desestabilizaciones de la glucemia. La asociación de fibra vegetal disminuye este efecto.
Como veis, asociar estos excelentes nutrientes para que actúen en sinergia y sacarles el máximo partido, es muy fácil y rápido. Bon appétit!