Imaginábamos, deseábamos no volver a escribir jamás nada parecido después de aquellos meses de confinamiento tan duros. Angustia, miedo, sensación de encierro, tristeza por el paso de las semanas y que nada cambiara. Pero esta segunda ola ha llegado a un punto en el que parece que nos encaminamos a algo parecido. Ojalá no llegue esto a una situación tan drástica y extrema como la que se vivió en marzo-abril, en la que estuvimos encerrados semanas y semanas y tan solo teníamos la ‘libertad’ de salir a la calle para las actividades esenciales. Y eso no incluía correr, lo que para muchos es una vía de escape tremenda. Aún nos acordamos de aquella emoción de regresar al asfalto, a nuestros caminos, después de más de dos meses sin poder hacerlo.
Volver, aquello que no queríamos ni imaginar
Pues bien, de nuevo la pandemia del coronavirus se está encaminando hacia un descontrol que puede tener pronto consecuencias. Ya las está teniendo de hecho en varias regiones y ciudades en las que hay cierre perimetral. Y unas cuantas comunidades ahora han pedido al gobierno que decrete el estado de alarma para poder realizar ‘toques de queda’. Una medida menos invasiva que un confinamiento (esperamos que no pase de aquí), pero que también puede alterar las rutinas de entrenamiento que habíamos recuperado tan felizmente. Cierto es que tal vez ahora valoramos mucho más que antes el hábito de salir a correr, de hacer nuestras series, de ir a nuestros parques.
El presidente Pedro Sánchez ha comparecido de urgencia este domingo al mediodía para anunciar los pormenores de este nuevo estado de alarma. Toque de queda de 23:00 a 6:00 de la mañana (variable según vaya decidiendo las comunidades autónomas, que podrán oscilarlo entre las 22h y las 24h y las 5am y las 7am y son las responsables de las decisiones que crean que deban tomar según vaya evolucionando la pandemia en cada área geográfica).
Toque de queda
De esta forma, en esa franja horaria solo se podrá salir para ir o volver de trabajar, para ir a comprar medicamentos, cuidar de alguna persona enferma o motivos muy justificados. No se podrá realizar ejercicio al aire libre en ese periodo de tiempo. De momento no se aplica un confinamiento domiciliario, pero no se descarta que haya que aplicarlo. Veremos ahí cómo afectaría al deporte en el exterior, si se decidiría prohibirlo o se establecerían algunas franjas como en las primeras fases de la desescalada.
