Faltaban 5 kilómetros para meta en el Maratón de Buenos Aires, momento en el que el argentino Mariano Mastromarino tomó el mando de la carrera superando a los atletas keniatas Juius Karinga y Peter Muasya. La sorpresa fue tal que desde el coche de cabeza los organizadores increparon al atleta local pensando que era un intruso “Salí de la carrera, salí. No te metas que es una carrera”.
Después del incidente Mastromarino acabó imponiéndose con 2h15m28s obteniendo el primer triunfo local en los últimos diez años , en una carrera donde participaron más de 10 mil competidores. La keniata Lucy Karimi ganó por tercera vez consecutiva entre las mujeres, con un registro de 2h 38m 53s.
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