La caja de herramientas del corredor

La edad exacta en la que los hombres alcanzan la madurez es difícil de determinar, 30, 40, 50 años, quién sabe? Hay demasiada incertidumbre sobre el tema. Pero si que hay una fecha importante, el día en el que para hacer alguna chapuza en casa no tienes que pedirle las herramientas a tu padre. Algo similar ocurre con la gente que se aficiona a correr, con el paso del tiempo empezamos a acumular una serie de “herramientas” para intentar hacer alguna chapucilla antes de un entreno o carrera importante. A continuación os dejo las que yo suelo tener siempre a mano:

• Impermeable: mojarse antes de una carrera o justo después, puede ser sinónimo de resfriado seguro. Un impermeable que no tengamos miedo a tirar puede salvarnos de pasar mucho frío antes de una carrera invernal. Se puede sustituir por una bolsa de basura grande, todo depende de lo que nos preocupe nuestro estilismo y lo que nos duela gastarnos un par de euros por uno de “usar y tirar”.
• Braga: no es una herramienta en si misma, pero no viene mal guardar una en un sitio seguro para cuando todas las demás estén en el cubo de la lavadora. La marca más valorada es sin duda Buff.
• Frontal: aunque no seáis de los que hacéis trail nocturno, siempre os puede sacar de un apuro tanto corriendo como durante un apagón en vuestra casa. Podéis encontrar frontales baratos desde 15 € en amazon.

• Manta térmica: en invierno, cuando se corre por montaña o zonas donde no hay mucho trasiego de personas, una simple torcedura puede hacernos pasar dos o tres horas muy duras de vuelta a casa, empapados de sudor y pasando frio. Por menos de 5 euros y sólo 100 gramos de peso, podemos llevar una manta térmica que nos ahorrará muchos sustos. Si solemos hacer mucha montaña, un silbato de emergencia también sería muy recomendable.
• Funda impermeable: Similar a las bolsas de congelación con cierre tipo “zipper”. Perfecta para llevar el movil, documentación y el dinero de la merienda en días de lluvia o para evitar que todo quede empapado con nuestro propio sudor. Se pueden encontrar desde 7 € en amazon.
• Herramientas de masaje: Una pelota de tenis para la planta de los pies y un flotador de piscina (tipo “churro”) para gemelos-sóleos, todo esto, junto con nuestras propias manos será lo que de verdad repare los daños de nuestras extremidades inferiores. También podemos comprar modelos “profesionales” de rodillos para masaje por poco más de 15 € en amazon.

Compartimento de primeros y segundos auxilios.

Todo corredor debe tener también un pequeño botiquín con aquello que pueda necesitar antes, durante o después de una carrera. Lo podemos comprar ya completo, pero básicamente “los imprescindibles” serían: apósitos, esparadrapo, tiritas, apósitos especiales para ampollas (Compeed o hansaplast), toallitas desinfectantes, betadine o similar, crema antinflamatoria (cuidado donde te aplicas el radiosalil, si no quieres empezar a correr antes de tiempo), pack estomacal (Fortasec+Almax), tijeras, paracetamol, afterbite (correr por montaña=bichos) y cualquier otra medicina (de curso legal) que habitualmente toméis. Además de lo anterior, también podemos incluir:

• Tiritas redondas: Si no queréis que vuestros pezones se desangren con esas camisetas que podrían utilizarse como una lija del “8”, y después de muchos experimentos, las tiritas redondas, son la mejor solución que he encontrado hasta la fecha (sobre todo a la hora de quitarlas sin sufrir depilación).
• Frío-Calor: Mi bolsa de hielo sintético y yo somos inseparables (y la de guisantes congelados para partes del cuerpo con orografía complicada). “Menos antiinflamatorios y más frío” creo que podría ser un buen lema para reducir el gasto farmacéutico.
• Crema solar: Para cuello y hombros, y sobre todo para carreras por montaña en verano. Consejo: no echarse crema en la cara, es una muy mala idea si empezamos a sudar.
• Aguja e hilo: No pienses que te vas a coser tus heridas como Rambo, pero alguna que otra puntada en tu pantalón favorito te sacará de un apuro nudista antes de una carrera y tampoco vendría mal saber cómo tratar las temidas ampollas.
• Tape: Cinta adhesiva hipoalergénica e inelástica, especial para vendajes funcionales.Se pude considerar la “cinta americana” del corredor y, al igual que pasaba en el “Equipo-A”, sirve para casi cualquier cosa, vendajes en fascias, tobillos, evitar rozaduras en partes sensibles, reparar mochilas, etc. De todas las que he probado, me quedo con el de la marca Strappal.
• Vaselina: Las rozaduras en pies, muslos, pezones, etc pueden hacer un entrenamiento o una carrera un verdadero suplicio. Más que nunca, se hace necesaria la frase “Lubrifica que algo queda”.
• Cordones: Un número impar de cordones de zapatillas que has ido guardando sin un propósito fijo.
• Varios: Mechero, imperdibles, cinta americana, gomas elásticas, pañuelos de papel, fortasec (para cuando ya has gastado todos los pañuelos de papel), ….

Como toda caja de herramientas que se precie, la lista puede ser interminable y es imposible que haya una caja igual que otra. Todo lo anterior es lo que yo tengo dentro de mi caja de herramientas, bueno, dentro de un caja vieja de zapatillas. Y vosotros, ¿qué tenéis en vuestra caja de herramientas de corredor?

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