En esta review explicaremos con detalle todas las novedades del Garmin Forerunner 230, nuestras impresiones tras probarlo y realizaremos una comparativa con otros relojes-gps de similar precio y funciones. Este nuevo Forerunner 230 viene a ser la evolución natural del Forerunner 220 (puedes leer su review aquí), uno de los relojes más vendidos hasta la fecha de la casa americana Garmin y el que ha sido mi reloj de cabecera durante varios años. Tengo que admitir que no ha sido hasta varios meses después de probarlo, justo cuando trasteaba con el Forerunner 235 (review), una versión gemela del Forerunner 230 que incorpora pulsómetro óptico, cuando que he terminado de ver el potencial del nuevo FR230 frente a la competencia, y en concreto respecto al FR220. Dejando al margen las notificaciones móviles y las funciones de monitorización de la actividad diaria, hay cuatro novedades que destacan sobre el resto:
Mejoras evidentes que muchos de los usuarios del FR220 echamos en falta en su día, pero su precio de salida, 249 € sin pulsómetro, hacía difícil recomendar este reloj hasta que no hemos visto alguna oferta interesante. Aunque muchos corredores no necesitarán cuatro datos por pantalla y tendrán suficiente con 6-8 horas de autonomía para sus carreras o entrenamientos semanales, otros muchos encontrarán en este FR230 un sustituto perfecto para sus antiguos FR610 o FR320xt. Sin perder funciones de entrenamiento, encontrarán un diseño mucho más ligero y mayor conectividad.
En las siguientes líneas intentaremos desgranar qué es lo que hace (y hará) del Forerunner 230 una de las mejores opciones de compra, sino la mejor, cuando hablemos de un pulsómetro-gps para corredores que buscan algo más que medir ritmos y distancias.
El Forerunner 230 se presenta sin grandes cambios estéticos frente al FR220. Con un diseño casi idéntico Garmin continúa apostando por la caja redonda de 45×45 mm, manteniendo su reducido espesor (11,8 mm frente a los 12 mm del FR220), pero ampliando esta vez la superficie útil de la pantalla, pasando de 25 mm a 31,1 mm (aunque achatados). Más espacio que se aprovecha para pasar de un máximo de tres datos por pantalla a cuatro.
El reloj sigue estando construido completamente en materiales plásticos, incluida la pantalla y los botones. Para mi es una ventaja más que un inconveniente, además de reducir considerablemente el peso del reloj (sólo 41 g), la pantalla suele resistir mejor a golpes y arañazos que una de cristal mineral, pero entiendo que a muchos os resulte a primera vista un reloj “de plástico” y os guste más el aspecto y tacto del Fenix 3 o del Polar V800 (a mi también). En cuanto a la correa, es muy similar a la del FR220 y FR260, aunque más blanda y elástica (falta ver si es igual de resistente).
En la foto siguiente podéis ver el contenido del pack con pulsómetro, Forerunner 230 HRM (Heart Rate Monitor): instrucciones, banda torácica premium, sensor de frecuencia cardíaca (que se puede acoplar a las bandas de Polar si se os rompe) y cable USB para carga y conexión a la web Garmin Connect mediante el programa Garmin Express. La carga sigue siendo la habitual en Garmin, mediante pines metálicos que garantizan la estanqueidad, pero en este caso es de tipo “pinza”, diferente al utilizado en el FR220. Algún día Garmin debería plantearse la estandarización de sus cables de carga, ganaríamos los usuarios y seguramente ellos reducirán costes.
Idéntica estética, aunque con novedades en su interior y funcionamiento, además de añadir nuevos perfiles deportivos y algunas funciones útiles para nuestros entrenamientos, el Forerunner 230 tiene el mismo nivel de conectividad que los modelos superiores (Fenix 3 o FR920xt). Si vinculamos el reloj con un móvil con Bluetooth 4.0 tendremos nuevas pantallas con notificaciones móviles, eventos de calendario, widget del tiempo y un widget de control para activar y desactivar el bluetooth, hacer sonar el teléfono (Find my Phone) o entrar en modo “noche” y desactivar así las notificaciones móviles. Junto a las notificaciones móviles el FR230 también incorporá como novedad frente al FR220 (y FR620) la función de monitorización de la actividad diaria.
Si entramos más al detalle veremos que aunque el Forerunner 230 no cambia mucho en su exterior con respecto al FR220, si que recoge la mayoría de las funciones del que hasta hace unos días era el modelo tope-gama de la marca, el Forerunner 620 (review), y además trae mejoras técnicas que lo sitúan por encima de ambos modelos en muchos aspectos:
(*) Mediante la aplicación dwMap de la plataforma Connect IQ podremos navegar por rutas que importemos a través de su propio portal, una solución “básica” para aquellos que quieran utilizar el Forerunner 230 en actividades de montaña y outdoor. Aquí tenéis un artículo completo explicando cómo instalarla y su funcionamiento básico.
Una vez vistas las especificaciones técnicas más importantes, veamos qué utilidades tiene este reloj para ayudarnos en nuestros entrenamientos de carrera y cuales de ellas son realmente una novedad frente al FR220 y el FR620, dos de los competidores más similares a este nuevo FR230, como veremos en la comparativa final.
Os dejamos también los enlaces del manual del Forerunner 230 en formato pdf y en este otro en formato web y el procedimiento para resetear el Forerunner 230 si se os queda “colgado” alguna vez:
Soft Reset (no borra datos):
Reset de fábrica “Hard/Master Reset” (borra historial y la configuración):
Además de las mejoras comentadas anteriormente en cuanto a la precisión del gps (registro por segundo y GLONASS), la autonomía de 16 horas y el paso de un máximo de tres campos a cuatro campos por la pantalla, la novedad principal en cuanto a funciones de entrenamiento la encontraremos en las cantidad de alertas que podemos programar en cualquiera de los modos deportivos. Junto a los avisos automáticos por vuelta “autolap”, donde veremos el tiempo invertido en la distancia que hayamos configurado previamente, con el Forerunner 230 podremos establecer las siguientes alertas:
El procedimiento para crear este tipo de entrenamientos por intervalos es muy sencillo, desde el menú de entrenamientos del perfil deportivo que elijamos se accede al menú de intervalos donde crearemos la sesión con un periodo de calentamiento y/o enfriamiento y un bloque principal donde se repetirá un intervalo las veces que queramos con un periodo de descanso entre cada una de esas repeticiones. Las distintas fases anteriores se pueden programar tanto en tiempo, distancia o como dejarlas abiertas (se finalizarán cuando pulsemos el botón “lap”). En la imagen siguiente podéis ver algunas de las pantallas para crear un entrenamiento por intervalos del tipo: calentamiento + 4 x 1km con un 1 min de descanso entre cada kilómetro + enfriamiento.
Otra de las ventajas frente a la competencia es la posibilidad pasar de un intervalo al siguiente sin esperar que este se acabe simplemente pulsando el botón lap, especialmente útil si no queremos programar desde la web entrenamientos donde vamos acortando el tiempo de descanso o la distancia del intervalo principal. Una vez finalizado el entrenamiento podremos ver el tiempo de cada intervalo en el reloj y el resto de métricas en la web de Garmin Connect y en la app móvil.
Si necesitamos entrenamientos más complejos, con la herramienta de entrenamientos avanzados de la web Garmin Connect se pueden establecer tantas fases de intervalos y bucles de repetición como queramos, así como asignar un rango de frecuencia cardíaca o ritmo a cada uno de los intervalos. Una vez creado podremos transferirlo al reloj a través del cable USB o vía bluetooth por medio de la app móvil.
En cualquier actividad, al mantener pulsado del botón derecho, además de acceder a la opción de navegación “volver al inicio”, aparecerán la opción para editar los campos de datos que tenga predefinidos, el bloqueo de la pantalla o el acceso a los controles de la música (si estamos utilizando el reproductor de nuestro móvil).
El Forerunner 230 también dispone acelerómetro interno con el que, además de utilizarse para monitorizar nuestra actividad diaria, obtendremos el dato de cadencia de pasos en carrera y nos servirá también para registrar el ritmo y las distancia en carreras de interior o cintas de correr sin necesidad de comprar un podómetro externo. Antes de usarlo en cintas de correr se recomienda correr un par de carreras en exterior con el gps activado de forma que se ajuste nuestra longitud de zancada. Una vez realizada la “calibración anterior”, la precisión del Forerunner 230 en interiores es relativamente buena como se observa en el resultado de este test donde la cinta estaba programada a 11 km/hora (5:30 min/km) y un grado de inclinación (para simular el esfuerzo en carrera al aire libre).
Otra de las novedades del Forerunner 230 frente al Forerunner 220 es la posibilidad de utilizarlo como reloj para actividades de ciclismo sin tener que modificar datos y cambiar el tipo de actividad una vez la sincronizamos. Además de dos perfiles de ciclismo específicos, Bici y Bici en Interior (con el GPS desactivado), con los que podremos configurar alertas y pantallas de datos específicas para esa actividad, el FR230 añade la compatibilidad con sensores de cadencia y velocidad con conexión ANT+. El FR230 no permite conectar sensores de potencia. Si queremos saber la velocidad y distancia recorrida en el perfil de ciclismo indoor es imprescindible conectar un sensor de velocidad a la rueda (trasera), ya sea el propio de Garmin o uno compatible, como el dual de Wahoo que se ve en la foto siguiente y es que tiene la particularidad de ser compatible tanto con dispositivos que utilizan Bluetooth (Polar o Suunto) como con los que utilizan ANT+ (Garmin).
Desde la configuración del reloj se pueden desactivar aquellos perfiles de actividad que no usemos y a través de la plataforma de aplicaciones de Garmin (Connect IQ) podremos instalar nuevos perfiles de actividad con funciones especiales como este para senderismo o incluso perfiles de natación para piscina.
El Forerunner 230 hereda del FR620 las funciones relacionadas con el estado de forma y la recuperación. Estos datos estarán disponibles solamente si entrenemos llevando el pulsómetro. Para evaluar nuestro estado de forma, el Garmin FR230 estimará nuestro VO2max (*) en función de cada carrera que hagamos llevando el pulsómetro, a partir de este valor tendremos un “pronóstico” de tiempo en diferentes distancias de competición. Tras probar muchos modelos de Garmin con esta función, en mi caso, la realidad es más triste que la mostrada en el reloj, y los valores están por encima de mis marcas. Como norma general, estos valores deberíamos tomarlos como un “potencial” de nuestras capacidades aeróbicas y ver nuestra evolución relativa a lo largo del tiempo más que como el tiempo exacto que haremos en una determinada carrera.
(*)VO2max es el máximo volumen de oxígeno (en mililitros) que puedes consumir por minuto y por kilogramo de peso corporal en tu punto de máximo rendimiento.
Junto a los valores de estado de forma, al finalizar una actividad en la que llevemos el pulsómetro, el reloj nos indicará el tiempo de recuperación necesario antes de realizar otra actividad. Así mismo, a los pocos minutos de haber empezado otra actividad nos indicará si nuestro estado de recuperación ha sido óptimo o no. Aún no cumpliendo los periodos de descanso mostrados, a veces de más de 72 horas, no he llegado aún a ver en el reloj un aviso de falta de recuperación o similar, pero en todo caso, si os apareciese mejor hacerle caso.
Como ya he comentado en anteriores reviews, estas funciones de estado de forma y recuperación creo que no llegan a ser realmente útiles para la mayoría de usuarios que no nos dedicamos profesionalmente al deporte, por lo que deberíamos verla más como una curiosidad que como una función determinante que nos decante por este u otro reloj-gps.
Al igual que los últimos relojes lanzados por Garmin, este Forerunner 230 incorpora las mismas funciones que una pulsera de actividad aportando datos de pasos, calorías y distancia recorrida diaria, así como un registro de la calidad y cantidad de nuestro sueño. Esta función se activa desde la configuración del reloj y aparecerán los datos en un widget junto al de la hora y el de las notificaciones móviles o el tiempo.
Junto al registro de datos de actividad, también podremos activar las alertas de inactividad, de forma que el reloj nos avisará cuando llevemos más de una hora sin movernos (en las horas del día que le indiquemos). Una utilidad más para los que quieran llevar el FR230 a diario, ahora que el modelo en negro no “canta” tanto.
La conectividad bluetooth del Forerunner 230 permite recibir notificaciones de todo tipo de nuestro móvil, desde correos electrónicos hasta notificaciones de mensajería instantánea como whatsapp o Facebook, aunque el tamaño de los mensajes está limitado y solamente podremos leer el encabezado de emails o parte de los mensajes.
Junto a las notificaciones también se puede activar una pantalla (widget) con la información del tiempo y otra con las notas del calendario que tengamos en nuestro teléfono móvil. Un punto a favor del “caro” Forerunner 630 frente a este modelo es la pantalla táctil que facilita el manejo de las notificaciones al realizarse de forma más similar al teléfono móvil que si lo hacemos mediante los botones del FR230.
La conectividad bluetooth también permite el seguimiento en directo de nuestras actividades “live track” vía web. Al activarlo y realizar una actividad con gps (y llevando el móvil con nosotros), los usuarios que invitemos podrán seguir nuestro recorrido en “vivo”.
La incorporación de este modelo dentro de la plataforma de aplicaciones IQ Connect permite añadir nuevas funcionalidades y aplicaciones para aprovechar la conectividad bluetooth. Si finalmente os decantáis por este modelo, echadle un vistazo porque hay algunas interesantes.
Garmin por fin se ha decidido a incluir en este Forerunner 230 (y en los nuevos FR235 y FR630) una versión en colores menos llamativos, negro con un toque en blanco o gris, que lo hace más discreto en el día a día, sobre todo, si queremos sacar partido a las funciones de monitorización de la actividad diaria y notificaciones móviles. Junto a la versión en color negro, el Forerunner 230 está disponible también en morado y amarillo a un precio de salida de 249 €. Lo que pagaréis seguramente si decidís comprarlo en el Corte Inglés o en la propia web de Garmin, si queréis ahorraros casi un 20%, y de paso apoyar esta sección (*), en amazon los encontraréis desde 196 €
Si estáis pensando en comprar el pack HRM, es cuando entra en juego el Forerunner 235, un modelo idéntico al FR230 que añade el pulsómetro óptico en su parte trasera, lo que nos permite olvidarnos de la banda torácica y además realizar la monitorización continua de nuestro pulso a lo largo del día y la noche (tendremos estadísticas de nuestro pulso en reposo a lo largo del tiempo). El precio de salida del FR235 es bastante alto, 349 €, aunque ya empieza a verse en amazon por algo menos (265 €). Lo hemos podido probar y, hablaremos de él en un próximo artículo, ya os adelantamos que el pulsómetro óptico funciona razonablemente bien si lo llevamos bien ajustado (ejemplo de entreno con series). Si vuestros entrenamientos son casi siempre por zonas de frecuencia cardíaca y estabais pensando en comprar el pack con pulsómetro, creo sinceramente que merece la pena pagar esos 30 € de más por el FR235. Si, como yo, os guiáis más por ritmos que por pulsaciones, la versión sin pulsómetro del Forerunner 230 me parece la mejor opción del mercado para un reloj-gps de gama media, más aún, cuando el FR220 ha pasado de los habituales 155-165 € a un rango variable entre 172-190 €.
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Una vez vistos los precios del Forerunner 230, y teniendo en cuenta que buscáis un reloj-gps con opciones de entrenamiento avanzadas y una autonomía elevada, además de la versión con pulsómetro óptico (FR235) que hemos comentado en el apartado anterior, nos encontraremos con cuatro relojes de un rango de precios y características similares que nos harán saltar las dudas sobre cuál de ellos comprar:
Garmin Forerunner 220: Una opción más que válida si tenemos limitado el presupuesto. Muchas de las mejoras que introduce el FR230 (notificaciones móviles, monitorización de la actividad diaria o el perfil de ciclismo) no son estrictamente necesarias para la mayoría de corredores populares, incluso la batería de 10 horas del FR220 es muchas veces más que suficiente. Después de probar ambos, sólo la grabación por segundo, las nuevas alertas y la pantalla más amplia hacen que el FR230 esté realmente por encima del FR220, por lo que al final el precio juega el papel más importante. Ahora mismo, y hasta que el FR220 no abandone el rango de los 172-190 € y vuelva a los habituales 152 €, en la versión sin pulsómetro, creo sinceramente que merece más la pena comprar el FR230 que apostar por el FR220.
Garmin Forerunner 620: más cercano en precios al Forerunner 230 que el Forerunner 220, se puede encontrar desde 228 €, es el competidor más fuerte al compartir, entre otras funciones, el perfil de ciclismo, grabación por segundo y las funciones de recuperación y estado de forma. Por contra, aunque también dispone de bluetooth, no desarrolla todo el potencial de conectividad, ya que no tiene notificaciones ni tampoco es compatible con el portal IQ Connect. Como ventajas frente al FR230 aporta la pantalla táctil, conexión WIFI para descargar las actividades y actualizar el dispositivo, la función Virtual Partner y el precio, el modelo con pulsómetro es más económico (desde 251 € ) que el pack HRM del FR230. Dos relojes-gps muy similares y en los que dependerá bastante el uso diario que le vayáis a dar para apostar más por FR230 que por el FR620.
Garmin Forerunner 630: La versión actualizada del FR620 sale al mercado por 400€, aunque ya lo podemos encontrar desde 342 € (381 € con pulsómetro) sigue siendo un reloj muy caro. Añade a las ventajas del FR620 (wifi, pantalla táctil, virtual partner) la función Virtual Racer (competir contra otras actividades), las alertas por objetivos dobles y la posibilidad de guardar ubicaciones, aunque no creo que compensen la diferencia de precio, más aún estando en el mercado el FR920xt y a la espera de su sucesor a lo largo de este año, de precio similar, con las mismas funciones de entrenamiento y que además permiten navegación completa y actividades de natación. Sólo si no tenéis limitación económica y estáis muy acostumbrados a la pantalla táctil del FR620 o utilizáis mucho las función Virtual Partner puede que os merezca la pena dar el salto a este modelo y no quedaros con el Forerunner 230. En cuanto a las métricas avanzadas de carrera, disponibles también en el Forerunner 620, creo que les pasa lo mismo que a las funciones de estado de forma o recuperación, datos curiosos, pero que no aportan mucho valor al día a día de un deportista amateur o popular. (Puedes leer más sobre técnica de carrera y gadgets en este artículo).
Suunto Ambit3 Run: Junto con el Ambit3 Sport, esta versión del Ambit3 es una de las opciones más interesantes para los que combinan asfalto y montaña (en carrera o en bici), ya que permite importar rutas al reloj desde la propia plataforma de Movescount y seguirlas mientras realizamos una actividad. Junto a la función de navegación, la precisión es otro de sus puntos fuertes gracias a la antena cerámica que incorpora en un apéndice de la carcasa. Sus desventajas frente al Forerunner 230 son principalmente la falta de avisos por vibración, una menor autonomía (sólo 10 horas) y las limitaciones para crear entrenamiento avanzados, por ahora sólo es posible desde dispositivos móviles con iOS. Se puede encontrar un poco más barato que el FR230, desde 199 sin pulsómetro y 154-199€ con la banda incluida, pero sólo recomendaría esta opción frente al FR230 a aquellos que salgáis habitualmente a descubrir nuevas rutas por montaña.
A continuación os resumimos los puntos fuertes y las flaquezas que hemos ido comentando a lo largo de esta review al Forerunner 230:
Puntos fuertes:
Desventajas y aspectos a mejorar.
En cuanto al “precio”, creo que no lo podemos considerar como un inconveniente, aunque tampoco es un reloj barato. Exceptuando el Ambit3 Run, está muy por encima de relojes como el Polar M400 o el nuevo Tomtom Runner 2, que aun siendo más baratos, no llegan a situarse al nivel de prestaciones del FR230 por lo que considero que cuando se situe finalmente en los 200 € será un precio adecuado al mercado.
En resumen, el FR230 se presenta como una buena actualización del FR220, y al igual que pasó con éste último, lo veremos durante los próximos años como una de las mejores opciones si buscamos un reloj-gps que permita algo más que registrar distancia y ritmos. Pero tampoco hay que olvidarse de que si el FR230 se haya convertido en una de mis recomendaciones habituales para corredores que busquen sustituir su viejo gps (*) tiene que mucho que ver “la cuestión económica”, cuando el FR220 se encuentre por debajo de los 150 €, la lucha entre ambos modelos será más reñida.
(*) Como primer reloj creo que los modelos FR15, FR25 o incluso el Polar M400 son más que suficiente para dejar de llevar el móvil mientras corremos.
Espero que la review del Forerunner 230 os haya servido para despejar cualquier duda y, como siempre, tenéis el apartado de comentarios para cualquier pregunta o sugerencia y nuestra cuenta de Twitter @GadgetsCorredor para estar informados de todas las noticias relacionadas con el deporte y la tecnología.
PreMarathon.com @PreMarathon (Victor)
Opinión:
Este nuevo Garmin Forerunner 230 incorpora todas las peticiones de los usuarios del FR220. Una pantalla más grande, 4 campos por pantalla, 16 horas de batería y una mejora de la precisión, gracias al Glonass y a la grabación de datos por segundo, junto a los nuevos perfiles deportivos, hacen de este FR230 la mejor opción del mercado si buscas un reloj-gps para correr de gama media alta . (desde 192 €).