Es interesante el sabor agridulce en el paladar del outsider, de aquel que por azar o elección se involucra en una suerte de rebeldía como la que antaño era el correr. Empecé a contar kilómetros a la temprana edad de ocho años por estímulo paterno y no fue fácil, porque aquella actividad extraescolar no era solo impopular sino que además era objeto de burlas; tendría en torno a diez años cuando aquel día daba vueltas al parque O’Donell en Alcalá de Henares y un patoso decidió ganarse el respeto de sus amigos a mi costa. A cada vuelta me increpaba con gran energía y mayor falta de imaginación, y también a cada vuelta crecía su frustración por culpa de mis oídos sordos. El chaval encontró la solución escrita en las piedras, las cuales empezó a lanzar contra mí. Y a aquel cretino no le faltaba razón porque eso ya no me daba igual, pero el azar fue bondadoso y dejó aparecer por allí a mi tío en el momento justo para dejarle caer un buen chaparrón de voces que amargarían su tarde.
Ahora ya no se lleva, pero muchos sabréis de qué hablo si os cito el “un dos, un dos”. Cada vez que un grupo de colegas quedaba estático en un banco y veía pasar a alguien corriendo cerca, era obligatorio hacer algún comentario al respecto, el cual casi siempre era marcarte el ritmo. Si tu valentía era de caballero medieval o nivel samurai y te atrevías con las mallas, entonces más valía que también llevases tapones para los oídos para poder abstraerte de la hostil locuacidad de los observadores.
Después crecí, y las hostilidades se volvieron mucho más comedidas porque mi paciencia había disminuido y mi fuerza aumentado. Sin embargo continuaba fuera de la ley, me daba igual el fútbol, me acostaba temprano casi todos los sábados para competir el domingo, y usaba mallas con asiduidad.
Con el paso de los años se popularizó lo del correr, después se puso de moda y llegó el running, y en un punto llegué a estar convencido de que había llegado el momento de no sentirse raro; de pronto lo mío era normal, con ciertas peculiaridades pero con cierta sensación de pertenencia a un grupo.
Pero el running se ha pasado de frenada y a día de hoy el gusto agridulce del outsider vuelve a embriagar mi paladar. La ilustración exacerba la realidad absoluta de un presente en el que la devoción del ser humano por los extremos hace posible que este no vea más allá de su nariz. La tendencia es valorar lo que en cada momento esté de moda, lo más gigante, lo más caro, lo más (supuestamente) épico, lo que más pinte en redes sociales… Hoy cualuier runner que se precie debe poseer el título honorífico de finisher, ha tenido que correr un maratón; un triatleta respetable debe tener en su palmarés un Ironman. Si no pasas por ese aro no estás en el club.
En 1988 participé en mi primera carrera, a la edad de ocho años. Una vida de kilómetros pero ningún maratón, circustancia que me hacer sentir como si hubiera estudiado medicina durante siete cursos para en el último año no entregar el trabajo de fin de carrera. Quizá me he vuelto adicto a ese extraño sabor de la rebeldía, como el que se acostumbra a la cerveza, o a fumar… pero estoy pensando enfrentarme a un reto, el de no correr nunca un maratón.
tal cual, tambien preguntan cuanto tardaste, cada ves que corres alguna carrera menor y tambien te miran con ojos chinos cuando dices que corres por placer y a los 60 años, no tengo un maraton, pero soy corredor.
Parece una realidad muy negativa…no a la inducción!
Desde hace años yo corro las carreras populares haciendo marcha atlética. Así que el cachondeo de los corredores es habitual en los primeros metros… hasta que les paso a mitad de carrera 😀
Son sólo modas, luego esos mismos se pondrán a hacer curling porque será lo más, y nos quedaremoszlos de siempre con el “un dos,un dos”
Yo la verdad es que he corrido muchas maratones, pero cuando todavia se consideraba una prueba para gente con poco sentido comun…eso me salva
Me he permitido buscar en la Real Academia Española la palabra “correr” y de las más de 40 maneras, en ninguna pone “correr un maratón”, por algo será…
“Copio y pego” tal cual..para los que corren por “moda” o por ponerse en el facebook lo que hacen, etc…
correr Conjugar el verbo correr
Del lat. currĕre.
1. intr. Dicho de una persona o de un animal: Andar rápidamente y con tanto impulso que, entre un paso y el siguiente, los pies o las patas quedan por un momento en el aire. Salió a correr por el parque. Los galgos corren tras la liebre.
2. intr. Ir deprisa. Esas motos corren mucho.
3. intr. Hacer algo con rapidez, darse prisa. Se vistió corriendo y salió. Corro A decírselo.
4. intr. Dicho de un fluido, como el aire, el agua, el aceite, etc.: Moverse progresivamente de una parte a otra.
5. intr. Dicho del viento: Soplar o dominar.
6. intr. Dicho de un río: Seguir su curso por determinados lugares.
7. intr. Ir, pasar o extenderse de una parte a otra. La cordillera corre de norte a sur. El camino corre paralelo a la carretera.
8. intr. Dicho del tiempo: Transcurrir, tener curso. Corren los días. Ha corrido el plazo.
9. intr. Dicho de una noticia, un rumor, etc.: Circular, propalarse, difundirse. U. t. c. tr.
10. intr. Dicho del curso, cuidado o despacho de algo: Estar a cargo de alguien. Eso corre de mi cuenta.
11. intr. Dicho de una paga, un sueldo o un salario: Ir devengándose.
12. intr. No haber detención ni dificultad en el pago de sueldos o salarios.
13. intr. Partir irreflexivamente a poner en ejecución algo.
14. intr. recurrir (‖ acogerse al favor de alguien).
15. intr. Dicho de un negocio: Pasar por la oficina correspondiente.
16. intr. Dicho de una cosa: Estar admitida o recibida.
17. intr. Dicho de una cosa: Pasar, valer durante el año o tiempo de que se trata.
18. intr. Valer, costar.
19. intr. Entender en algo, encargarse de ello. Corro CON el encargo. Corro POR ello.
20. intr. Corresponder, incumbir, tocar. A Manuel le corre la obligación de leer.
21. intr. Tener trato y buena correspondencia con alguien. Corría CON su compañera.
22. intr. Mar. Navegar en popa o a un largo, con poca o ninguna vela, a causa de la mucha fuerza del viento.
23. tr. Hacer que se incline y caiga uno de los platillos de la balanza por haberle puesto más peso que al otro.
24. tr. Cabalgar a la carrera en un animal, generalmente un caballo. Corre siempre caballos de pura raza.
25. tr. Perseguir o acosar a alguien.
26. tr. lidiar (‖ burlar al toro).
27. tr. Hacer que una cosa pase o se deslice de un lado a otro, cambiarla de sitio. Corre esa silla. Correr un poco los botones. U. t. c. prnl.
28. tr. echar (‖ deponer de un empleo o dignidad).
29. tr. Echar o pasar un cerrojo, una llave, etc.
30. tr. Echar o tender un velo, una cortina, etc., cuando están levantados o recogidos; y levantarlos o recogerlos, cuando están tendidos o echados.
31. tr. Desatar el nudo o lazada de una cinta, cordón u otra cosa que hace lazo y con que está cerrado o asegurado un talego, una bolsa, etc.
32. tr. Estar expuesto a ciertas contingencias determinadas o indeterminadas, arrostrarlas, pasar por ellas. Correr peligro, aventuras, la suerte de soldado.
33. tr. recorrer (‖ atravesar un espacio). Adolfo ha corrido medio mundo.
34. tr. recorrer (‖ efectuar un trayecto).
35. tr. Recorrer en son de guerra territorio enemigo.
36. tr. Arrendar o sacar a pública subasta algo.
37. tr. Avergonzar y confundir. U. t. c. prnl.
38. tr. coloq. Arrebatar, saltear y llevarse algo.
39. prnl. Dicho de quienes están en línea: Hacerse a derecha o izquierda.
40. prnl. Dicho de una cosa: Pasarse, deslizarse con suma o demasiada facilidad.
41. prnl. Dicho de una vela, de una bujía, de un hacha, etc.: Derretirse con exceso, haciendo canal la cera o el sebo.
42. prnl. Dicho de un color, de una tinta, de una mancha, etc.: Extenderse fuera de su lugar.
43. prnl. coloq. Excederse, espontanearse demasiado.
44. prnl. coloq. Eyacular o experimentar el orgasmo.
45. prnl. coloq. Ofrecer por algo más de lo debido. No te corras.
a más correr
1. loc. adv. Con la máxima velocidad, violencia o ligereza posible.
a todo turbio, o a turbio, correr
1. locs. advs. Por mal que vayan las cosas, o por desgraciadamente que sucedan.
al correr de la pluma
1. loc. adv. a vuelapluma. Escribir al correr de la pluma.
al correr del tiempo
1. loc. adv. andando el tiempo.
correrla
1. loc. verb. coloq. Andar en diversiones o en lances peligrosos o ilícitos, especialmente si es a deshora de la noche.
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Mi primera carrera fue hace 38 años he corrido cross pista populares he marchado incluso me he atrevido con los concursos pero nunca ha corrido una maratón y por supuesto no la correré simplemente porque el mundo del atletismo esta lleno de estímulos y retos y no todos pasan por el maratón.
La hipocresía, soberbia y la superficialidad reinan en la sociedad. Lo importante de acabar una maratón es poner la foto en facebook habiendo acabado una maratón son los likes y los comentarios. Aunque me sienta deprimido desde hace años, este logro lo camuflará durante las horas que siga teniendo likes. No odies a ésta gente por ser así. No juzgueis si no queréis ser juzgados, aunque aún esteis dolidos de lo que hayáis tenido que soportar de jóvenes. Es hora de superarlo independientemente de la edad que tengáis. Saber perdonar es importante. Y sentirse más superior por hacer menor tiempo es un poco mas que arrogante, soberbio y superficial. Aprended un poco de keniatas, etíopes y fijaros en la humildad y espíritu de superación que tienen. La prueba posiblemente más dura de unas olimpiadas y seguramente la que menos postureo tiene. Cuando veo su foto tras haber ganado maratones, estoy convencido de que lo que menos les importa es que les estén haciendo una foto para el nytimes, grabando para la eurosport y lo que estén pensando los demás. Y en cuanto a lo que nos venden los medios y las marcas a la sociedad sólo hace falta preguntarse si sabéis quién tiene el récord del mundo de maratón y quien tiene el de 100m. Y lo entiendo, a veces cuesta ignorar cuando ves a personas entrenando o compitiendo con 400€ encima y les pasan otros mas preparados con 40€ encima. De cualquier modo, no juzgueis si no queréis ser juzgados; si otras personas han sido crueles contigo, no seas cruel tu con ellos o serás igual que el y si alguien tuviera complejo de inferioridad, lo puede tratar y solucionar de otra manera. Odiando a los demás y teniendo likes en el facebook no es la solución 🙂
La foto lo dice todo. Es que me descojono pensando en un conocido así. Yo creo que si pudiera, el colgaría las fotos en Facebook tras acabar cada entreno jajaja a alguien le tiene que mostrar sus logros, creo q el no los aprecia y es una lástima
Yo hace años en mi primera trail d montaña d 27km tras juzgar a un anciano en la salida pensando: ¿este hombre sabe donde viene? Ese hombre estaba jubilado, tenía una barriga mas que notable y siendo claros, solo le faltaba el bastón. Era alguien a quien me imaginaba mas animando a su nieto detrás de la salida, que no se si llegaríamos a tomar 300 personas. El caso es que me dio una tremenda bofetada de sabiduría al verlo pasarme acabando la primera cima que igual ya eran mas d 1000m d desnivel. Y el caso es que se lo agradezco tanto a ese hombre. Ese hombre, me enseñó a no juzgar a alguien que no conoces independientemente de la apariencia que tenga. No he vuelto a hacer esa trail, pero me gustaría volver a hacerla para verlo, hablar con el y animarle antes de la salida, algo que seguramente no hubiera hecho siendo un niñato arrogante que se creía superior por tener menos años o creer que iba a hacer mejor tiempo