Hablar de Jerónimo Bravo es hablar de uno de los entrenadores a nivel internacional con más postín. Lleva a más de 20 atletas repartidos por todo el planeta, entre ellos el hasta hace apenas unas semanas ‘recordman’ mundial de media maratón, el eritreo Zersenay Tadese. Reparte su tiempo entre Madrid (donde se encuentra su cartel general, que es la Casa de Campo) y el resto del mundo cuando pasa temporadas con sus alumnos, por así decirlo. Ha compartido horas y horas de entrenamiento en África con algunos de los mejores fondistas del mundo. Y, lo más importante, habla sin tapujos, sin pelos en la lengua. Sobre rebajar las dos horas en el maratón, sobre los beneficios de entrenar en los famosos ‘training camp’ africanos, sobre el estado de salud actual del atletismo español, entre otras muchas cosas, hablamos con él en este programa especial sobre Jerónimo Bravo en la Radio del Corredor.
¿Han tardado demasiado los atletas africanos en centrarse en el maratón?
“Creo que lo que ocurre con los atletas africanos es que al final han empezado a entrenar el maratón, primero porque son muchísima cantidad y de la cantidad sale la calidad, y segundo que han empezado a focalizarse en el maratón específicamente. Es muy raro ver a los grandes maratonianos como Kipchoge aunque les paguen fortunas correr algo que no sea una maratón. Al final es una prueba que requiere especialización y la especialización lleva al conocimiento de la materia y ello a la mejora de rendimiento”.
¿Han preparado históricamente mejor los maratones los atletas europeos que los africanos?
“Hay una contradicción. Creo que a día de hoy los atletas blancos, europeos o americanos, como los quieras denominar, van por detrás en el tema de la preparación del maratón. Tanto en lo que es la parte externa (hidratación, nutrición) como en la interna. Hay una opinión extendida que dice que ahora los atletas africanos corren más también porque les llevan técnicos europeos. Yo soy técnico europeo, pero por ejemplo a Kipchoge lo lleva un técnico africano. Al final, lo que ocurre es que hay que evolucionar y estar abiertos a muchas cosas. Puede ser que en África antes estuvieran detrás de los europeos, pero han sabido evolucionar y adaptarse y coger lo mejor de cada casa. Lo mejor del espíritu del atleta africano con la mejora que te pueda venir del conocimiento científico o técnico. Los atletas africanos, en sus posibilidades, todos están siguiendo la corriente creada a partir del ‘Breaking 2’. Ves a los atletas kenianos correr un maratón con mallas, hidratarse más, etc”.
¿Qué opinas sobre el auge de atletas europeos que quieren ir a entrenar a África?
“Hay las dos vertientes. La vertiente turística del atleta aficionado que quiere ir a Kenia como el que se va de vacaciones a Benidorm, por así decirlo. Por otro lado el atleta profesional. Yo he entrenado a atletas profesionales españoles como Iván Galán. Galán estuvo conmigo en 2006 entrenando en Eritrea. Me refiero a que no es algo tan novedoso. Lo que ocurre es que tienes que estar dispuesto a vivir como viven ellos y donde viven ellos. Estar allí una concentración de 20 días o un mes no aporta. Es muy positivo siempre y cuando esa filosofía de trabajo la mantengas en el tiempo. De nada vale irte un mes o dos a Etiopía, Eritrea, Kenia, a los mejores ‘training camp’ del mundo y que los otros ocho o nueve meses del año entrenes de otra manera a la que lo has hecho este tiempo en África. Un atleta africano no se va a coger un mes de vacaciones o 20 días como ocurre con los atletas europeos y en esos 20 días por supuesto van a descansar. Para ser como ellos y trabajar como ellos tienes que hacerlo siempre. A partir de ahí me parece interesantísimo. El aspecto lúdico de los que quieren ir a Kenia como los que van a la Maratón de Londres o Nueva York pues si te lo puedes permitir, magnífico”.
¿Es la clave de los atletas africanos su genética?
“Evidentemente el atletismo es un deporte básicamente físico, genético. Es innegable que las cualidades físicas van a estar por encima de cualquier otro aspecto. ¿Por qué los atletas europeos o blancos antes bajaban de una hora en la media o andaban en 2:06 en maratón y ahora estamos tan lejos?. Esas cualidades físicas también existían. El problema es que se ha producido una involución en el atletismo de blancos y una evolución en el atletismo africano”.
“La genética es una parte muy importante, pero no creo que sea solo la genética el motivo de la enorme diferencia que existe ahora mismo. Creo que habría que hacer también un estudio con atletas de primer nivel ‘caucasianos’, sean del país que sean, y a partir de ahí valorar. En 2004 participé en una investigación (publicada) en la cual se evaluó entre otros a todo mi grupo de eritreos y sí, existían diferencias significativas. Tenían una capacidad física por encima de lo normal, pero no era algo increíblemente determinante. Yo creo que a partir de ahí hay que hacer investigaciones los atletas blancos de primera fila con atletas negros de primera fila”, comenta Jerónimo Bravo.
¿Cómo es esto de tratar con atletas de nacionalidades tan distintas?
“Evidentemente conocer diferentes culturas gracias a llevar a atletas de nacionalidades tan dispares. Yo siempre he sido un ‘culo de mal asiento’, como se suele decir. El año 1997 ya estuve nada más acabar la carrera en México viendo cómo entrenaban los atletas de ahí, posteriormente estuve en la Universidad de San Diego…siempre he tenido inquietud por conocer la perspectiva cultural y personal de cada sujeto. De todas formas, yo lo que tengo que trabajar con el ser humano es su físico. No se pueden olvidar aspectos motivacionales, aptitudinales, pero la relación que pueda tener con un colombiano es igual que la que pueda tener con un filipino o eritreo. La única diferencia que he encontrado es en la capacidad de trabajo, que a día de hoy es mayor en los africanos, pero que no significa que cualquier otro atleta de otro país no pueda tenerla”.
¿Te esperabas que se batiera en Valencia el récord de media maratón de Tadese?
“Los récords están pensados para ser batidos. Cuando empezaba en esto Fermín Cacho no hacía récords de España, pero mientras se dedicaba a acumular medallas en Mundiales, Juegos Olímpicos y Mundiales. Las medallas no te las quitan salvo que pase algo muy extraño y los récords siempre te los acabarán batiendo. Me sorprendió que se batiera en Valencia el récord de mi atleta, de Tadese. No era el mayor candidato que tenía yo en mente para que lo batiera y la verdad es que siguiendo la evolución de la carrera aún me lo esperaba menos. En el kilómetro 10 creo que iban 22 o 24 segundos más lentos que el récord de la prueba, que a su vez era quizás 20 segundos más lento que el récord del mundo. Me extrañó y me sigue extrañando que puedas hacer un segundo 10.000 en 27:16, me parece pasmoso hacer la 11ª marca mundial de 10.000 en el segundo 10.000 de una media maratón…”.
¿Está un atleta por norma ya en declive a partir de los 35?
“Kipchoge es más o menos de la misma edad que Tadese y ha hecho el Récord del Mundo y está en su máximo esplendor. En este año que va a acabar pienso que estaba cerca de haber batido su propio Récord del Mundo de media, pero tuvo problemas en el gemelo. A día de hoy, creo que su declive está lejos de llegar. No va a hacer marca personal en el 10.000, que es una locura, pero en distancias más largas está para seguir superándose. El mejor Tadese, el que hizo 58:23, no reflejaba su nivel en ese momento. No había liebres, por ejemplo. Creo que estaba para bajar de 58. Creo que sí está ahora mismo sobre un nivel de 58:20-30. En 2004 ya fue medalla olímpica. Mantener la exigencia es muy complicado tanto tiempo. De todas formas si consigue mantener el hambre tiene mucho por hacer aún”.
Escucha la entrevista a Jerónimo Bravo en los siguientes enlaces:
