Analizamos la nueva ASICS Novablast 3, una avanzada zapatilla de running apta para todos los niveles y que llega con mucha energía. Lo de energía viene porque si la anterior release ya utilizaba un material amortiguado de altas prestaciones como es FlyteFoam Blast, ahora es FlyteFoam Blast+.
Resulta que con FlyteFoam Blast+, la marca japonesa le ha dado una vuelta de rosca (más) a eso de obtener una amortiguación con un aterrizaje suave, pero que a la vez proporcione un mayor rebote y aprovechamiento de la energía que se libera en el momento de impactar contra el suelo, al correr. Así Novablast 3 va a ofrecer algo más de su característico efecto trampolín, que ha de ayudar a corredores y corredoras a impulsarlos en las carreras.
Pero hay más, porque los de Kobe le han pegado un buen mordisco al peso, al bajar de los 275g de Novablast 2 a los 253 de ahora. 22g puede parecer poco en el día a día, pero en el ámbito de las zapatillas de running es una auténtica proeza y más teniendo en cuenta que la zapatilla no ha sido remodelada como si empezara de cero, sino que más bien tiene un diseño continuista. Ese peso era en el acabado masculino, en el femenino lo es de 222g.
Más cositas nuevas a destacar de entrada: La ligereza viene dada, también por la nueva malla, del tipo Jacquard y la mediasuela, que aunque ha crecido en volumen y trae más grosor, contiene el peso, haciendo aún más inverosímiles esos 253/222 gramos. Y algo en lo que no cambia: su aspecto diferenciado de la colección de ASICS. Porque aunque haya muchos modelos diferentes en la marca nipona vemos que siguen una cierta línea y ya, desde el mismo momento en que nace Novablast, ya se ve que la suya es disruptiva respecto a la de las demás… Y así continúa.
Sin más, vamos a entrar al detalle.
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Análisis técnico ASICS Novablast 3
MEDIASUELA
La mediasuela de ASICS Novablast 3 es la parte de la zapatilla que llega con más cambios. Bueno, con casi todos, porque estrena material y diseño (incluyendo las geometrías). Lo que no cambia es que el/la atleta al que va dirigida será alguien con pisada neutra o que utilice plantillas personalizadas.
A nivel de material, si antes utilizaba FlyteFoam Blast, que le hacía un gran servicio, ahora es FlyteFoam Blast +una evolución de aquel. Pero vayamos por partes porque si no es un lío.
FlyteFoam es un material utilizado por ASICS en sus modelos de running de gama alta. Consiste en una espuma amortiguada que es muy ligera. Como dato curioso, utiliza unas fibras orgánicas anidadas que dan cohesión al material haciendo que sea más durable. Cuando ASICS le añade el sufijo “Blast” está indicando que esa espuma FlyteFoam se le ha potenciado la capacidad de rebote, es decir, cómo reacciona a la presión del corredor corredora que “lleva” encima, cada vez que golpea el suelo durante la carrera. En sus inicios, cuando ASICS hablaba de la modificación Blast, se refería a ella como si hiciera el efecto de cama elástica. Bien, no es tan exagerado, pero da una idea de por dónde van los japoneses con el desarrollo de esta tecnología.
Y entonces llegamos a ese “+” tan discreto al final de la palabra pero que indica que ese derivado “Blast” ha sido también modificado. Básicamente se trata de potenciar aún más el rebote, para lograr ese tacto característico de Novablast de absorción del impacto suave, pero con un enérgico retorno en la salida.
Si nos vamos al apartado de las geometrías, nos paramos en concreto en dos: el volumen o grosor de la mediasuela, y las formas exteriores que la bordean. De lo primero hay que decir que Novablast 3 crece en 1mm respecto a Novablast 2. Por tanto, las alturas de la mediasuela son de 31mm en la zona del talón y 23mm en la del antepie… Eso en el acabado de hombre, porque en el de mujer es diferente con sus 30mm atrás y 22mm en la zona delantera. El drop, eso sí, es el mismo en ambos sexos: 8mm. Si tenemos en cuenta que la zapatilla tiene 1mm más en toda la superficie de la mediasuela, hay que reconocer que tiene mérito que, al final, la zapatilla resulta que pesa menos, y eso es por la unión de todos los elementos, como por ejemplo la nueva malla, que veremos en el apartado del upper.
La otra geometría que ha cambiado ha sido la de los laterales de la mediasuela. Antes eran figuras que ahora se han transformado más bien en ángulos. Estéticamente ha mejorado puesto que ya no tiene el aspecto un poco rudo que nos destapa el nuevo diseño, ahora que podemos hacer la comparación. Y que no sólo es visual: esas forman colaboran también en la amortiguación ya que están situadas estratégicamente para que ayuden al material a recibir la presión al impactar contra el suelo. Si además vemos que han ensanchado levemente esta zona, sabemos que por fuerza va a ser aún más estable que en la entrega anterior.
SUELA
La suela de ASICS Novablast 3 no difiere mucho respecto a la anterior (bueno, bueno, bueno…, sólo si no tenemos en cuenta que hay un acabado de “trail” que asoma las orejas por ahí abajo y con un diseño agresivo para todo terreno).
No difiere porque mantiene más o menos el mismo dibujo que en las dos entregas anteriores: Un talón en forma de herradura que crece hacia adelante por ambos laterales de la suela y hasta la puntera, dejando en el medio un hueco que ahorra en peso y que deja una isla de caucho justo en el centro de los metatarsos, donde se va a dar la mayor impulsión durante la pisada.
El tipo de goma utilizada en la suela es AHAR, dejando AHAR+ para la zona del talón, donde hace falta más resistencia frente a la abrasión y, por tanto, frente al desgaste. AHAR+ es un caucho que contiene carbono, de ahí que su durabilidad sea la máxima entre todas las gomas sólidas que fabrica ASICS y que sólo podemos encontrar en calzado técnico.
Al tener el talón en forma de herradura, se favorece el impacto de cualquier estilo corriendo, sin importar cómo se entre, por eso irá bien para la forma de correr de cualquiera. Aun así, al talón tiene una ranura en el centro que da paso a una enorme franja central que recorre todo el interior de la suela (y escarbando un poco en la mediasuela).
Esa franja tiene tres funciones en Novablast 3: en primer lugar ayuda a guiar al durante la transición de la pisada; en segundo lugar, ayuda en el bajo peso final de la zapatilla desde el momento en que está eliminando Flytefoam amortiguado de la mediasuela, pero sobre todo caucho de la suela, el material más pesado en una zapatilla de running; y en último lugar, ayuda en la reactividad de la zapa, ya que al caer con todo nuestro peso esa franja cede, pero cuando comenzamos a aflojar para levantar el pie, rápido intenta volver a su posición inicial, dándole así un leve empuje, aunque sea en unos pocos milímetros de recorrido.
UPPER
El upper de ASICS Novablast 3 utiliza una malla Jaquard entre cuyas gracias está que sujeta de manera más cómoda que con una malla convencional. También por la gestión de la transpirabilidad ya que es un tipo de tejido muy ventilado que facilita el flujo de aire que entra por la puntera.
Destaca también por la vistosidad. Si antes eran unas mallas lisas, de colores cálidos, ahora una serie de líneas le dan un aspecto más agresivo y los tonos en colores vivos acentúan esa característica. No tiene que ver directamente con el rendimiento, pero hay que entender que a la gente también le tiene que gustar lo que le entre por los ojos y si esta es una zapatilla para ir rápido, su aspecto actual, es más acorde.
Pero el upper no es sólo el tipo de tejido y los colores. Este corte superior utiliza un 75% de material reciclado, de lo que es el material principal con el que está confeccionada la malla. De esta manera, ASICS aporta su granito de arena en cuanto a reducir los residuos y las emisiones de carbono durante el proceso de producción de la zapatilla.
En la parte más alta tenemos los cordones, que son planos y están pasados por cinco de seis ojales (el último, a la altura del tobillo, sirve para quien quiera cerrar más por esa parte). No están pasados por la lengüeta, pero por parte de ella no hay problema porque está unida al cuerpo de la zapatilla y no le hace falta ser anclada por los cordones para no moverse.
Por debajo de todo esto, encontramos la plantilla, que está fabricada con una confortable espuma que también colabora en la sostenibilidad. En este caso, porque en el proceso de producción se utiliza una técnica de teñido que ahorra un 33% del gasto en agua, y un 45% en las emisiones de carbono respecto de un teñido convencional (según mediciones de ASICS).
Por debajo de la plantilla, encontramos un footbed de suave FlyteFoam. Siguiendo por el interior, la cazoleta está toda rodeada de espuma que va a abrazar al pie con fuerza, pero también con suavidad en el taco. Además, está cubierta por un tejido diferente al de la malla exterior, siendo éste aún más suave.
Todo eso por la cara interna, porque rodeando al tobillo hay un contrafuerte (no tan contundente como en una zapatilla de entrenamiento diario convencional) que no es visible desde el exterior del tobillo ya que lo tapa la malla. Sí que hay unas tiras en TPU que dan algo de consistencia, ayudan, sí, pero el trabajo sucio de la estabilización lo realiza en buena medida la pieza de dentro.
Y no todo es sumar y sumar… Por el camino ha habido una baja: la tira que colgaba del talón en ASICS Novablast 2 ha pasado a mejor vida. No sabemos por qué ha desparecido en esta nueva entrega, pero seguro que la van a echar de menos quienes la utilizaban para calzarse más rápida y cómodamente. Para quien no, es un detalle intrascendente. Por otro lado, no interviene en el rendimiento de la zapatilla corriendo, así que la incidencia de su ausencia es mínima.
NOVABLAST 3 TR
Curioso el acabado de ASICS Novablast TR. El TR de “trail” aparece por ahí pero… no es una zapatilla de trail al uso. Además, ASICS ya tiene una colección de trail que es increíble porque toca todos los palos y con una muy alta calidad… ¿Entonces? ¿Para qué una Novablast TR?
ASICS la presenta como que tiene una suela exterior específica para trail… Y es cierto, pero no es tan agresiva, o incisiva, o profunda como para llevarnos a cualquier rincón… ¡Pues ahí está la clave! Esta Novablast TR es una muy buena zapatilla para esos terrenos mixtos, donde combinamos asfalto (¿para salir de la ciudad o del pueblo?) con esos caminos, pistas forestales sin grandes dificultades y que nos permitan correr. Lo que decimos caminos “corribles”.
Un caso práctico sería la típica carrera que sale de un pueblo (o cualquier otro entorno urbano) y después de un rato serpenteando por calles y/o alguna carretera, sale de ese entorno habitado para perderse por caminos de campo y pistas anchas que suban y bajen por los alrededores para acabar volviendo al asfalto en un final rápido. Podría ser cualquiera de las cientos y cientos de carreras que se mueven en entornos mixtos de asfalto/tierra del calendario y que no se meten, para nada, en trialeras, torrenteras, barrancos o zonas técnicas de rocas. Además, ASICS mismo ya tiene un buen grupo de zapatillas para hacer el “cabra” a disposición de quien le vaya la marcha.
Eso sí, Novablast TR forma parte de una colección llamada “Nature Bathing” que se inspira en los tonos tranquilos que se encuentran en la naturaleza (aunque uno de los colores, que recuerdan al fuego, le pega más a este perfil rápido de zapatilla).
NOVABLAST 3 PLATINUM
Aún hay otro acabado especial de ASICS Novablast 3 y es Novablast 3 Platinum. Esta release disfruta de todas las propiedades y ventajas que hemos conocido en Novablast 3, lo que sucede es que a nivel estético, la marca japonesa ha buscado otra cosa.
Le ha dado un acabado diferente al upper, con detalles plateados en la malla que hacen que la zapatilla destaque. Por abajo, la mediasuela tiene matices de color diferentes según el ángulo desde donde se mire o la incidencia de la luz. Sin duda que es sorprendente en una marca como ASICS, que no suele tener productos que jueguen con la iridiscencia.
Otro aspecto que hay que destacar es que, a pesar de la filigrana estética, los materiales del upper también son reciclados en parte, siguiendo con la tónica sostenible de la nueva entrega de esta zapa.
Resumen y Precio
ASICS Novablast 3 es una zapatilla de running para todos los niveles, pensada y diseñada para correr de manera ágil. El diseño, la forma de la mediasuela y suela permiten que sea utilizada tanto en sesiones de entrenamiento, como en carreras sin necesariamente ser una zapatilla mixta, ni mucho menos una voladora o zapatilla de competición.
Su uso ideal, aparte de cualquier tipo de sesión, sería en aquellas donde interese rodar rápido o hacerlo de manera ágil, como en rodajes rápidos, progresiones o cambios de ritmo. Si no se tienen zapas mixtas, se va a comportar de lujo también en entrenamientos de series.
Es una zapatilla pensada para la ruta, sobre todo para distancias cortas y medias, pero ASICS amplía su horizonte de uso al comercializar un acabado TR con igual upper y mediasuela, pero con suela pensada para correr por superficies de tierra, llevando la agilidad de este modelo TR a ese terreno (cualquier carrera de las muchas de entre 8-10km y 18-20km que salen de un entorno urbano y discurren por caminos y carreteras pequeñas entre localidades puede ser un buen entorno donde explotarlas).
A pesar de aumentar la cantidad de material FlyteFoam de la mediasuela, el peso ha bajado mucho respecto a la entrega anterior y ahora queda en 253g en el acabado de hombre y 222 en el de mujer. Además, el compuesto no es FlyteFoam a secas, sino FlyteFoam Blast+ que, a la capacidad de aportar una amortiguación suave, ligera y reactiva, le potencia la capacidad de rebote. Aún en la mediasuela, el drop es de 8mm para ambos sexos, pero con unas alturas de 31/23mm en el caso de ellos y 30/22mm en el de ellas.
La suela está construida con AHAR, excepto en el talón, que es AHAR+, al que se le adiciona carbono para que dure aún más, mientras que en el upper mantiene la misma línea en cuanto al diseño, pero cambia en cuanto al estampado (y más en el acabado Platinum), con una malla Jaquard, cómoda, ligera y muy transpirable.
El precio oficial de ASICS Novablast 3 es de 150€. El de Novablast 3 TR también es de 150€ y el de Novablast 3 Platinum de 260€.
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