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Al Acecho

Con la edad comenzamos a dar importancia a pequeñas cosas que antes no la tenían. Con la ilusión de participar en Lanzarote Marathon me han venido esta semana muchos recuerdos de juventud. Cuando era pequeño iba con mis padres de veraneo a Lanzarote muy a menudo. Hace muchos años que no he vuelto por allí, quizás por eso esta Maratón me ilusiona tanto.

Solía hacer mucha pesca submarina, casi a diario. Famara, Pechiguera y casi cualquier sitio de Lanzarote acogían nuestras inmersiones. Era otra época, entonces podías casi pescar en cualquier sitio, el concepto de protección del litoral era algo que aún no estaba demasiado desarrollado. Poder pescar o no era algo que definía el estado del oleaje. En aquella época podías incluso transportar un fúsil de pesca en el avión, algo que hoy es impensable.

En la pesca submarina bajas en apnea, cuando estás ahí abajo, estás solo. Cuanto más tiempo resistas más posibilidades tendrás de atrapar a tu presa. Exactamente igual que en la Maratón, donde “Resistir es Vencer”. La Soledad de la carrera y el resistir para vencer es algo que ya conozco. En las primeras semanas de plan la Paciencia más que nunca se convierte en una virtud.

Mi técnica favorita siempre fue la de “al acecho”. Bajas muy despacio, te mantienes a la espera en absoluto silencio, casi mimetizándote con el fondo, y acechas a la presa con sigilo hasta que la distancia es buena para efectuar el disparo. Hay otras técnicas como la de divisar al pez desde arriba y tirarse a toda velocidad a por él, pero por alguna rezón siempre preferí ir al acecho.

Con mi plan de entrenamiento para Lanzarote Marathon estoy utilizando la misma técnica de “al acecho”. Voy subiendo en kilómetros e intensidad poco a poco, me mantengo en la zona alta de trabajo unas cuantas semanas y cuando la distancia es la adecuada me lanzo a por la carrera. Utilizando un símil de pesca submarina, esta semana que ha pasado he estado simplemente deslizándome poco a poco, subiendo kilómetros e introduciendo los primeros entrenos de calidad. Todo con mucha calma y paciencia, los resultados no van a llegar en 7 días.

Los comienzos siempre son duros, el cuerpo no responde como esperas. Miras los ritmos que hacías en planes anteriores y te deprimes, aún estás muy lejos de hacer aquellos “killer-entrenos” que hacías. Pero sabes que con el paso de las semanas comenzarán a llegar las buenas sensaciones, la fisiología funciona así.

Lo más importante es que he comenzado a sumergirme, en silencio, con la humildad que necesitas para capturar una presa que es mucho más grande que tú. Confío en hacer un disparo certero y que Lanzarote Marathon tenga un recuerdo permanente en mi memoria, como esos días de pesca en la costa cuando era niño.


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