Con 29 grandes vueltas a sus espaldas Adam Hansen (Lotto Soudal) ha dicho basta.
El ciclista australiano de 39 años ponía el pasado domingo en la contrarreloj de Milán el broche de oro a una trayectoria deportiva excelsa que probablemente ni él mismo habría soñado cuando pasó al profesionalismo en 2003.
Cierto es que con 13 temporadas en equipos de primer nivel los triunfos no han sido la nota predominante. Pese a las victorias parciales en Tour de Francia, Giro de Italia y campeonato australiano de contrarreloj, Hansen siempre ha destacado por ser un corredor de equipo. Un magnífico gregario que ha tenido en la regularidad su mejor arma.
Hansen es uno de los ciclistas más carismáticos del pelotón. El aussie ostenta todavía el récord de más grandes vueltas disputadas de forma consecutiva.
Nada más y nada menos que 20 grandes vueltas del tirón. Todo un reto físico y mental que el australiano superó con aparente normalidad.
Hansen, que también se ha hecho popular por ser vegano y fabricar sus propias zapatillas de ciclismo, se centrará ahora en los triatlones de larga distancia.
Un nuevo objetivo en el horizonte que a sus 39 años afronta con mucha ilusión.
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El ya ex ciclista profesional, a quien os recomiendo seguir en Twitter, no es nuevo en esto y es que el año pasado ya aprovechó el “parón” invernal para disputar ,con un gran tiempo, su primer Ironman.
Por extraño que parezca Hansen no será el primero ni el último ciclista que abandona el profesionalismo para centrarse en triatlones de larga distancia. Stefan Schumacher, Alexander Vinokourov o Andrew Talansky son algunos ex ciclistas que también probaron suerte con los Ironmans.
Aunque para caso curioso tenemos el de Cameron Wurf. El australiano que se encuentra disputando actualmente la Vuelta a España con el conjunto Ineos, sigue alternando el profesionalismo con los Ironmans.
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— Adam #Vegan Hansen (@HansenAdam) November 2, 2019
