Testing: New Balance 1080v2

La New Balance 1080v2 es el modelo que la marca sitúa en la parte más alta de su gama de zapatillas neutras. En línea con la tendencia creciente en el mercado de calzado técnico de running, este modelo se presenta aligerado respecto a su antecesor, 297  frente a 343 gramos de la 1080, y más aún si lo comparamos con los de temporadas precedentes.

De este modo nos surgen dos preguntas clave que trataremos de resolver con este test; ¿cómo afecta este adelgazamiento de la zapatilla a su capacidad de amortiguación de impactos?, ¿mantiene la 1080v2 la estabilidad necesaria para un modelo tope de gama?

A simple vista apreciamos una mediasuela de menor grosor, la cual, unida a la incorporación del nuevo y más ligero compuesto N2 nos da una primera respuesta al por qué de su ligereza. Como bien sabemos, de un pie más cercano al suelo resulta un apoyo más estable, algo que es aprovechado en la 1080v2 para eliminar piezas estabilizadoras. Únicamente encontramos una en el centro de la mediasuela (TBEAM) de pequeño tamaño y que no alcanza a elevarse por los laterales de la misma. También los contrafuertes del talón son de menor rigidez y longitud, características ambas que previsiblemente incidirán en la sujeción del pie en las fases de contacto y apoyo.

Una vez calzada, la NB 1080v2 es lo que prometía, una zapatilla ligera y confortable cuya construcción presenta ciertas peculiaridades a tener en cuenta:

• Relación superficie plantar/volumen: nos encontramos con que el antepié desborda por los laterales al tiempo que los ojales del cordaje se encuentran muy próximos entre sí. No resulta incómodo ya que la construcción mediante tiras de sujeción horizontales pegadas a una muy elástica  malla permite una buena adaptación (flecha 1), pero un pie por fuera de la mediasuela no es la mejor garantía de estabilidad en el apoyo.
• Profundidad/sujeción en el talón: el talón de la zapatilla aporta poca profundidad (flecha 2) que unida a la escasa rigidez y longitud de los contrafuertes antes comentada, habrán de ser tenidas en cuenta, especialmente por aquellos corredores que precisen de especial sujeción en la fase de contacto del pie.
• Vaciado de la mediasuela interna a nivel del mediopié (flecha 3): esto, unido a su curvatura y ausencia de estabilizador lateral favorece la rotación interna del pie y el tobillo. Ocurre justo lo contrario en la parte externa (flecha 4), donde mediasuela y suela son un continuo que aporta más estabilidad para apoyos supinadores. 

Ya en marcha, las sensaciones que nos aporta la NB 1080v2 son geniales, el compromiso obtenido entre peso y amortiguación es de lo mejor que he probado, siendo el tacto de esta última de una dureza intermedia que agradará a casi cualquiera. El descenso de la altura del talón y su menor diferencia con el antepié hacen de este modelo una zapatilla ágil y dinámica para ir a casi cualquier ritmo. Colaboran en ello los numerosos y estratégicamente bien colocados cortes de flexión de la suela. La 1080v2 invita siempre a aumentar el ritmo permitiendo una buena fluidez en el apoyo y aportando suficiente amortiguación. Sin embargo, no alcanzo a disfrutar de la sujeción que me gustaría encontrar en una zapatilla de entrenamiento. El final de los entrenamientos deja en las piernas la protección de una zapatilla de entrenamiento y las sensaciones de una zapatilla mixta.

Los entrenamientos realizados calzando la NB 1080v2 corroboran también, además de lo expuesto hasta ahora, la previsible necesidad de mayor estabilidad, sensación ésta que se incrementa conforme lo hace la duración del entrenamiento y la inestabilidad del terreno, siendo el asfalto su hábitat natural.

Conclusión y recomendaciones

Aspectos que determinarán la relación entre la New Balance 1080v2 y tú:

• Pie: mejor tirando a anchos, sobre todo de talón. En la zona del antepié es fácil que la zapatilla se vea desbordada, pero  gracias a la calidad de sus acabados no afectará al confort.
• Pisada/apoyo: neutro o supinador. No aptas para plantillas ortopédicas.
• Ritmo/tipo de carrera: para ritmos de rodaje por debajo de 5’/km que, además de lo expuesto hasta ahora, no superen los 70/85 kg para mujeres y hombres respectivamente y cuya fase de contacto no sea muy de talón.

La New Balance 1080v2 es un modelo de zapatilla perfecto para todo corredor que quiera una zapatilla para cualquier ritmo, desde el rodaje más suave hasta la competición más exigente, que además reúna las característica descritas anteriormente. En el caso de corredores de mayor peso este modelo es una muy buena opción como complemento a su zapatilla de entrenamiento más pesada y estable.