El ucraniano Artem Bahmet es el protagonista de uno de los momentos más vergonzosos de la historia reciente del tenis mundial. Participó en las 'qualy' del torneo ITF 15.000 de Doha sin más nivel que el de un simple aficionado, siendo incapaz de sumar un solo punto ante el tailandés Koaykul. Perdió 6-0 y 6-0 dejando una imagen lamentable y dañando la reputación del torneo.