Alemania repitió en Qatar su pesadilla rusa de hace cuatro años: eliminada en fase de grupos. En ese momento, la tetracampeona del mundo fue incapaz de superar a Corea del Sur, México y Suecia y acabó colista. En esta ocasión, es cierto que mejoró su actuación previa (al quedar tercera, por delante de Costa Rica), pero no fue suficiente para avanzar a la segunda parte de la competición. Dos debacles consecutivas han propiciado que la Federación Alemana (DFB) busque un cambio de rumbo de su selección. Y los salvavidas parecen ser las viejas glorias de la 'Mannschaft'.

Alemania se encomienda a sus viejas glorias para redirigir el rumbo (leer noticia)