El FC Barcelona empezó la Liga de forma inmejorable con una goelada sobre el Villarreal en el Camp Nou. Koeman apreció que su trabajo ha cuajado con un equipo intenso, dinámico y efectivo. A ello añadió una pieza incontrolable: Ansu Fati. El canterano fue el factor diferencia. Dos goles en apenas cuatro minutos y forzó el penalti del tercero. Su ilusión es la del nuevo Barça y contagió al propio Messi.

Un huracán llamado Ansu Fati arrasa al Villarreal (leer noticia)