Como si cada minuto perdido tuviera que pagarlo de su propio bolsillo, Quique Setién no está desaprovechando ni una sola oportunidad de probar que lo verbalizado durante la semana no son palabras vacías, sino convicciones casi dogmáticas a las que no está dispuesto a renunciar.

Quique Setién utilizó a ocho canteranos ante el Granada (leer noticia)