El Celta tiene un problema. Poco juego y nada de gol. Algo que parece poco creíble cuando ves la plantilla del conjunto gallego. Están bloqueados y se vio de nuevo en Mendizorroza. Parecía que sacaban la cabeza tras su triunfo ante el Athletic pero el Alavés los mandó de nuevo a la realidad. Cinco derrotas en las últimas seis jornadas ponen de nuevo a Fran Escribá en el alambre. Cada vez más fino.

El Alavés mete al Celta de nuevo en la UCI (leer noticia)