Eden Hazard jugó 25 minutos ante el Cádiz 85 días después y tras pasar por el quirófano hace mes y medio. El belga simplemente cumplió, que ya es mucho después de tanta inactividad, en el arranque de un reto personal en el que se busca a sí mismo tres años después de llegar al Real Madrid. Aterrizó con etiqueta de galáctico (116 millones de euros) ilusionando a un madridismo huérfano de un delantero que borrase el recuerdo dejado por Cristiano Ronaldo y que acompañase a Benzema. El francés se quedó solo sin el portugués con un Vinicius al que todavía le dolían las encías futbolísticas por su juventud e inexperiencia en un ataque tan exigido como es el del Real Madrid, en el que Bale se borró tras ganar la decimotercera.

Bola extra del Real Madrid a Hazard (leer noticia)