El Chelsea puso fin a su mala racha de resultados, después de cuatro pinchazos seguidos en la Premier, con un incontestable triunfo en el derbi londinense ante el Tottenham. Un duelo cargado de morbo y alicientes que siempre tuvo color ‘blue’. Solo las intervenciones de Lloris impidieron que Stamford Bridge disfrutara de una goleada de los suyos. El regreso de José Mourinho a su casa, ante su sucesor, el hijo pródigo Frank Lampard, demostró que el alumno sabe cómo comerle la tostada al maestro. No hay visita del luso al Bridge con triunfo en su haber. Los lillywhites cerraron una semana negra.

El Chelsea borra del mapa al Tottenham en el derbi de Londres (leer noticia)