Poco tiempo para perder tenía el Lliverpool en una jornada donde el Manchester City descansaba. Conscientes de eso, los de Jürgen Klopp saltaron al campo del Fulham para buscar tres puntos que lo catapultaran, otra vez, a lo más alto de la Premier League. Y lo consiguieron. Victoria por la mínima ante un fuerte equipo de Scott Parker, que se paró firme pero cayó a la lona por dos golpes de Mané y Milner.

El Liverpool ejerce presión de líder (leer noticia)