Los campeones de la NBA, los Warriors han vivido una noche para olvidar y han caído derrotados por primera vez en casa esta temporada, frente a los Bucks (134-111). Pero ha habido algo peor: las lesiones. Draymond Green se ha ido al banquillo con un esguince en el dedo del pie antes de que Stephen Curry sufriera una lesión de abductor.

Curry, tranquilo a pesar de su lesión (leer noticia)