Diego Pablo Simeone lanzó balones fuera cuando fue interrogado por las imágnes que se vieron sobre el césped de Balaídos, especialmente en las pausas para hidratación, que dejaron entrever un distanciamiento entre los pesos pesado del vestuario blaugrana y el cuerpo técnico, especialmente la mano derecha de Quique Setién, Eder Sarabia.

Simeone dribla la crisis del Barça (leer noticia)