No hay tiempo para lamentaciones europeas. No hay tiempo para decir que falta fondo de armario. No hay tiempo para pensar en próximos partidos. No hay tiempo para fijarse objetivos más allá de la salvación. No hay tiempo para resignarse ante la baja de Raúl de Tomás. No hay tiempo para nada. Solo hay tiempo para el partido de hoy.

Final por la salvación en Pucela sin De Tomás (leer noticia)