El Inter hizo los deberes en Praga, donde cosechó una sufrida victoria ante el Slavia, y dependerá de sí mismo en la última jornada de la fase de grupos de la Champions League para sellar su billete a los octavos de final de la competición como segundo clasificado por detrás del Barcelona. Para conseguir su propósito deberá cosechar, precisamente ante los blaugrana en el Giuseppe Meazza, el mismo resultado (victoria, empate o derrota) que firme en el Signal Iduna Park el Borussia de Dortmund ante el Slavia.
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