No traten de entenderlo. Es fútbol. El Benfica demostró tener más vidas que un gato y puso contra las cuerdas al Leipzig con un 0-2 que le hacía depender de sí mismo para estar en los octavos. Sin embargo, un arreón final de los de Nagelsmann dejó el partido en unas tablas (2-2) que dan el acceso a la siguiente fase a los germanos y deja a los lusos desahuciados de la lucha. Forsberg con dos goles en el 90’ y 96’ neutralizó los de Pizzi y Carlos Vinícius. Mvogo evitó el 0-3 de De Tomás desde el centro del campo que habría cambiado la historia del grupo.

El Leipzig, a octavos tras un agónico empate que desahucia al Benfica (leer noticia)