El Athletic Club celebró la renovación de Nico Williams como si fuera un título. No es para menos: el equipo de Bilbao logró retener a una de sus grandes estrellas, autor de once goles en 47 partidos la pasada temporada, frente al interés de un gigante como el Barça. 200 millones de euros repartidos en un contrato de diez años, hasta 2035, convencieron al extremo, que después de quedarse a las puertas de jugar la final de la Europa League en San Mamés junto a su hermano Iñaki, podrá disputar la Champions League este curso. Sin embargo, la buena noticia con el jugador navarro no tapa un problema serio que la dirección deportiva bilbaína tendrá que solucionar en este mercado de fichajes.

Nico Williams no esconde el drama del Athletic (leer noticia)