No pudo afrontar en mejor estado anímico el FC Barcelona de Pep Guardiola la final de Copa contra el Athletic. El equipo azulgrana venía de sentenciar la Liga en el Santiago Bernabéu con un resultado histórico (2-6) y era finalista de la Champions League después de un gol agónico de Andrés Iniesta en Stamford Bridge. Hubiera podido jugar la final como campeón de Liga, pero el Villarreal, tres días antes, arrancando un empate (3-3) en el Camp Nou, pospuso el alirón.

Primer título de la era Guardiola (leer noticia)