El Rally de Cerdeña – Italia se disputó por primera vez en 1973, contó con victoria del noruego Peter Solberg y desde entonces forma parte del calendario del Campeonato del Mundo. En sus inicios la carrera tenía sede en San Remo y  en 2004 la organización trasladó la prueba a la isla de Cerdeña. Las pistas del trazado son rápidas, estrechas y rodeadas de vegetación baja y de rocas. La arena que cubre la pista desaparecerá después de las primeras pasadas y la superficie quedará bacheada. Los motores y transmisiones sufren debido al calor puesto que llegan a alcanzarse los 30 grados. Los mecánicos montarán suspensiones de tierra.